Capitolo Due

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Estaba apresurado buscando por todos lados de su cuarto, Bruno por curiosidad se asomó a ver qué buscaba.

—¿Que buscas, Fugo?. Vas a llegar tarde.

—Lo se. Oye Bruno ¿Sabes dónde están mis guantes de boxeo?

—Creo haberlos visto tirados por algún lado de la sala. Pero aprusuraté, no quiero que llegues tarde.

—Gracias. tranquilo, no lo haré —respondio con tranquilidad y se fue a la sala, cuando llegó vio a Mista y Giorno sentados en el sillón mientras cambiaban de canal.

—Hola Pannacotta—saludo el de rizos dorados.

—Qué hay fu.

—hola chicos...no han vist...

—¿Te refieres a esto?—interunpio Giorno para sacar por detrás de él los guantes, los otros dos se preguntaron de donde los saco y como supo lo que buscaba.

—Giorno se los extendió, y con gusto los agarró—Gracias Giovanna...—dijo algo extrañado.

—Encantado.

—Bueno, me tengo que ir. Nos vemos chicos—se fue de la sala y agarró su bolso.

—¿Quieres que te lleve?

—No gracias, Bruno. Puedo ir solo.

—Solo ten cuidado.

—Tranquilo—seguido de eso agarró la manilla y la giro, salió del departamento. camino por el pasillo Oprimió el botón del ascensor, espero por un corto segundo cuando se abrieron las puertas entró, se cerraron las puerta de metal y oprimió el botón de la planta baja para después descender.

Al salir a la calle, purple Haze se acercó, fugo solo le acarició la cabeza.

—Vuelvo pronto, no me sigas ¿Ok?—el perrito movió la colita, fugo lo tomo como un "Ok"

Del callejón salió un perro grande acercándose a Purple Haze, Fugo acarició las orejas del otro perro, este con gusto aceptaba las caricias del humano.

—Vamos Haze, ve con tu papá.
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Cuando llegó al lugar, camino por los pasillos, abrió su casillero y metió su bolso, puso su toalla en el cuello agarró sus guantes y su botella de agua,  pasaba  mientras veía a otros entrenar, a uno en específico saludo.

—¿Que hay Ghiaccio?

—¡No hay nada interesante por contar!—dijo mientras se desquisíava con el pobre saco.

Fugo solo asintió y se dirigió a su entrenador, lo saludo y puso su toalla y pote en un banco.

—Y bueno que vamos hacer hoy. ¿Acaso me harás correr por las calles mientras tú estás adelante en bicicleta?

—No, hoy solo quiero que practiques con el saco—agarro por detrás el saco, hizo un calentamiento rápido, presto atención al movimiento de los pies, dio el golpe, dando impacto.

—¡Vamos!

Siguió golpeando más fuerte, pero hay un pequeño detalle, es que  fugo tiende a cansarse muy rápido, y la razón es algo obvia.

Pannacotta agarró la toalla y su botella, tomo apresurado botando el agua en su mayoría, se pasó la toalla por la frente.

—Si no te cansarás tan rápido, estarías ya siendo unas de las mejores promesas del boxeo.

—¡¡Mentira!!

—¡¡Cállate, Ghiaccio!!. Y a lo que iba ¿Lo dice en serio señor Doc?

—Demasido. Pero bueno.......¡Se acabó tú descanso! ¿¡Vamos que esperas!? ¡Ponte pila! ¡Ponte pila!

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⏰ Última actualización: Sep 22, 2021 ⏰

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Un amor algo complicado [FugoNara]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora