— ¡Todo ésto termina hoy! — alcé mi vista y vi a Kate hablando
— ¡¿Y qué es lo qué vamos a hacer?! — preguntó Simon
— ¡Vamos a matar a esos malditos!
— ¡Si! — gritaron todos — ¡Kate! ¡Kate! ¡Kate! ¡Kate!
Mierda, todo ésto estaba fuera de control.
— ¡Tú dices Shady y yo digo side! — Mierda, Simon, solo los alborotas más
— ¡Shady!
— ¡Side!
— ¡Shady!
— ¡Side!
— ¡Shady!
— ¡Side!
— Simon — susurre
— Oh, despertaste — se acercó sonriendo
— ¿Qué mierda pasó? ¿Estás bien? — pregunté angustiado. Pero mierda, mi cabeza me dolía mucho
— Tranquilo, estoy bien, y tú Bueno...— se sentó al lado de mi y me miró sonriendo — tienes unos cuantos moretones en la cara, pero se podrán curar, no te preocupes — Mierda, mierda, mierda, que lindo se ve cuando sonríe
— S-si — desvíe la mirada nervioso — gracias... p-por ayudarme — yo no soy muy bueno peleando y...
— Está bien, Ethan, no tienes nada que agradecer — pude ver de reojo como acercaba su mano lentamente y tomaba la mia
~ Controla la maldita respiración, Ethan ~
— ¡Oigan, chicos! — grito Deena, a lo que yo y Simon nos miramos — ¡vengan! — Kate, Simon y yo fuimos rápido hacía donde se encontraba Deena
Genial... era un auto rojo que nos venía persiguiendo ¿no les bastó con la pelea? ¿Qué mierda querían?
— ¡¿Ésto es una broma?! — se quejó Kate
— Oigan qué no esa es... — señaló Simon
— Sam — ¿Sam?
— Simon se bajó los pantalones y gritó enseñando el trasero — ¡Sunnyvale es un asco!
— S-Simon —negué sonrojado
— Deena tomó la hielera — habré la puerta Kate
— mire a Deena — Deena, detente — pedí en tono de súplica
— No creó que ésto sea una buena idea — dijo Kate
— Kate, habré la puerta, ahora.
— Deena, escucha a Kate, por favor, Sam está ahí
Si, sé que nos estaban persiguiendo, pero podíamos seguir nuestro camino, Sam estaba ahí, estaba en ése auto.
Kate abrió la puerta, no sin antes mirarme y susurrar un "lo siento"
— ¿Deena, estás segura?
— En tres
— uno...
— Deena... — trató de hablar Kate
— dos...
— ¡Deena! — su nariz había comenzado a sangrar de la nada
— ¿Qué? — la miró Deena
— Tú nariz — contestó Kate haciendo que Deena se distrajera y soltara la hielera, y todo se fuera directo hacía el auto donde estaba Sam provocando que éste se saliera del camino
— ¡Detengan el autobús! — gritó Deena, pero no lo detenían
— ¡Mierda! ¡Que detengan el autobús! — grite exasperado. No podía vivir si a Sam le pasaba algo
Holaaa, cielitos, realmente esperó que la historia esté siendo de su agrado, los amo. <3💐✨
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