Secreto Real

Capitulo 10

~Hermione~

Me encontraba en el callejón Diagon comprando mis materiales con Hagrid, todo esto ha sido como un sueño toda mi vida pensaron que estaba loca por creer en la magia y resulta que soy una bruja y me encuentro en un callejón lleno de magia.

-Vamos Hermione todavía nos falta los libros y tu varita-

-Perdón Hagrid pero todo esto me parece impresionante, crees que podamos ir por mi varita primero-

-Claro, a dos tiendas se encuentra Ollivanders-

Entramos a la tienda y había demasiadas cajas, hasta que apareció un señor detrás de un estante

-No creí que la vería, sus padres deben de estar muy orgullosos de la bruja en que se convirtió-

Me quede muy confundida por como hablo, pero antes de que pudiera contestar el me paso una varita

-Pruébela señorita-

Al momento de agitarla rompí un florero que se encontraba en una mesa, y tiré unas cuantas cajas

-Definitivamente no, aunque talvez podría tratar con una varita que ha estado reservada espere-

El camino hasta una puerta e ingreso no tardo ni 5 minutos y regreso con una caja que parecía de cristal y me paso la varita, era una varita preciosa, al momento que la sostuve me rodeo una luz brillante

-Esto es increíble- lo dije sonriendo

-varita hecha de vid, núcleo de fibra de corazón de dragón con una pluma de fénix, interesante una varita muy rara, pero sabía que le pertenecería no por nada se parece a su madre-

Nunca en mi vida había estado tan extraña con una situación por mi mente pasaba muchas ideas una puede que alucine o ya le haya afectado estar rodeado de varitas, pero en fin solo pague cuando me gire en camino a la puerta

-Señorita-

Yo volteo y me le quedo viendo veo que se inclina como una reverencia y se levanta

-Es un gran honor que haya venido a mi tienda-

Definitivamente esto no podría empeorar, pero cuando iba saliendo choque con una señora y un chico un poco lindo.

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~Draco~

Mi madre me tenía rodeando mucho para conseguir mis materiales ya que decía que tendría que tener lo mejor y la verdad no quería borrar su sonrisa de orgullo hacia mí, nos dirigíamos a Ollivanders por mi varita le abrí la puerta a mi madre, pero una niña venia de salida y choco con ella

-Perdone no me fije que iba a ingresar alguien- decía la chica recogiendo unas bolsas y su varita

-Descuida, solo ten más cuidado- decía mi madre un poco seria ya que ella se comportaba como digna Malfoy adentro de casa podemos ser nosotros mismos, pero afuera superiores a todos

Ella se levanta y mi madre se le queda mirando un poco extrañada hasta que hablo

-Te pareces a, olvídalo solo fíjate la siguiente vez-

La niña asintió y salió rápido, tenía que aceptar que era linda nos acercamos al mostrador

-Pero mira a quien tenemos aquí al joven Malfoy-

Antes de que hablara mi madre el señor me había pasado una varita y la probé, pero tire un estante que tenia de libros, y así estuvo un gran rato ya había perdido la cuenta de cuantas varitas llevaba y cuantas cosas he hecho de romper vidrios, desacomodar cosas hasta que el señor se le ocurrió hablar

-Este día no podría ser mejor voy a tratar con una varita reservada-

Yo estaba confundido hasta que mi madre hablo –Hijo esas varitas ya han pertenecido a otros magos se les considera varitas especiales, pero claro solo lo mejor para ti-

El señor apareció con una caja de cristal y saco una varita mi mama estaba muy sorprendida jamás la había visto así

-Pruebe con esta joven Malfoy-

Me la paso y una luz me rodeo lo único que paso por mi mente fue al fin

-Interesante varita hecha de madera de espino, núcleo de pelo de unicornio y una pluma de fénix, una combinación muy rara pero una varita muy interesante-

Mi madre después de salir de la impresión –Esa varita era de Marcus Salvatore estoy segura-

-Así es señora Malfoy era del antiguo rey, por algo te eligió joven, y también hoy acaba de salir de mi tienda la varita de la reina-

-Quien se la llevo- pregunto mi madre un poco sorprendida esa varita con la de Marcus eran muy fuertes y lo más importantes unidas

-La jovencita con la que choco al ingresar señora Malfoy-

Mi madre abrió mucho sus ojos y dio el dinero –Nos retiramos gracias señor Ollivander-

Seguimos con nuestras compras, pero mi madre andaba distraída todo el camino

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