Eres mi gloria (You are my glory)

Capítulo 35

Qiao Jing Jing durmió inesperadamente profundamente esta noche.

El día siguiente fue la víspera del Año Nuevo chino.

Cuando se despertó, el cielo ya estaba completamente brillante. Abrió los ojos e inmediatamente olió el aroma de la comida. Lo que parecía pensar en algo. Se levantó de la cama y abrió la puerta del dormitorio. Efectivamente, voces familiares vinieron de la cocina. Sus padres ya habían llegado.

No importa lo ocupados que estén todos, toda la familia debe comer junta en la víspera del Año Nuevo chino. Estos últimos años, la cantidad de veces que fue a casa para celebrar el Año Nuevo chino fue muchas, pero ocasionalmente había momentos como este año, donde debido a que tenía que trabajar, sus padres venían para la reunión de Año Nuevo.

Caminó hasta la puerta de la cocina. Sus padres la vieron y las sonrisas se extendieron por sus rostros. "¿Estás despierto? No nos atrevimos a molestarte ".

Qiao Jing Jing se acercó y abrazó a la Sra. Qiao.

La Sra. Qiao se sorprendió un poco y la palmeó. "Jing Jing, ¿qué pasó? De repente, soy más cariñoso y lindo conmigo ".

"Nada", respondió Qiao Jing Jing con voz apagada.

Mientras estaba ocupado en el trabajo, el Sr. Qiao los miró y, un poco celoso, dijo con amargura: "¿No es su hija siempre así? Hambriento, ¿verdad?

"Sí." Qiao Jing Jing soltó a su madre. "¿Qué hay para comer?"

El Sr. Qiao ya le había preparado papilla dulce. Qiao Jing Jing estaba bebiendo gachas en la pequeña mesa de la cocina mientras escuchaba a sus padres discutir sobre la cena familiar de Nochevieja china.

"¿Por qué trajiste la carne de casa? No podemos terminar una pieza tan grande. Les dije que tuvieran más variedad, pero cocine porciones más pequeñas para cada plato, ya que mañana regresaremos temprano en la mañana y Jing Jing no come ". Esta era la Sra. Qiao hablando.

"¿Cómo puede faltar la cena familiar de Nochevieja? Es un buen augurio tener sobras ". Este era el Sr. Qiao, que había cambiado de carrera en los últimos años para estudiar cocina y hablar.

"Supersticioso y desgastante", concluyó la Sra. Qiao.

Qiao Jing Jing levantó la cabeza. "¿Ustedes dos no se irán conmigo mañana por la noche?"

Su actuación en la estación de televisión Shanghai Dragon probablemente terminaría mañana alrededor de las ocho a las nueve. Había pensado que sus padres esperarían a que ella regresara juntos a la ciudad de Jing.

El Sr. Qiao estaba cortando la carne. "Es el turno de nuestra familia de dar una cena en la noche de Año Nuevo de este año, así que tenemos que regresar temprano en la mañana para comenzar a prepararnos".

Qiao Jing Jing estaba molesto. "Entonces podría haber regresado hoy para cenar en familia en Nochevieja. Eso te habría salvado de correr ".

La Sra. Qiao dijo: "Entonces habrías tenido que correr. Somos libres, así que es mejor que vengamos. Si por casualidad hay un atasco y no puedes llegar al programa a tiempo, eso no sería bueno ".

"Oh." Qiao Jing Jing ya no dijo nada, sosteniendo el tazón de avena y bebiendo lentamente.

Con un tazón de avena dulce y tibia llenando su estómago, era como si estuviera empezando a sentirse bien y calentada desde el fondo del corazón, y la casa espaciosa y vacía se llenó de animadas interacciones humanas una vez más.

La cena familiar de Nochevieja esa noche no estuvo a la altura de las expectativas de la Sra. Qiao. Los platos eran muchos, pero los tamaños de las porciones también eran demasiado grandes. Después de decirse unas palabras auspiciosas, la Sra. Qiao comenzó a insistir en el Sr. Qiao nuevamente.