Paula se subio en el autobús, mientras que el conductor la observaba preocupado. Sus ojos estaban rojos de tanto llorar, su cabello esta en una desarreglada coleta, y llevaba los tacones en la mano. Ella ni siquiera lo miró, sólo se sentó en el último asiento, y miro por la ventana dejando que sus lágrimas inundaran su cara. No había nadie en el autobús salvo ella, su frente se apoyo contra el cristal, sintiéndolo frío. Helado.
Había encontrado la parada de autobuses, después de que Zayn hubiera tratado calmarla, diciéndole que tal vez no hubiera pasado nada. Pero los dos estaban borrachos, y ella no se acordaba de nada, y era muy probable que se hubiesen acostado juntos. Este pensamiento la hizo sollozar más fuerte, y enterró su rostro en las manos. Se limpio las lágrimas en cuánto vio que llegaban al centro de Londres, se puso los tacones y se arreglo de nuevo la coleta, camino como pudo con aquellos zapatos y le dijo al conductor que parase. El señor asintió y paro en una parada, la miró de nuevo con un deje de preocupación.
- Oiga, ¿está bien? -pregunto con un tono brusco. Pau solo asintió, las puertas del autobus se abrieron y ella bajo rápidamente antes de que los otros pasajeros pudieran subir.
Se gano varias miradas mientras pasaba. Estaría horrible, con los ojos rojos y el maquillaje corrido. Se abrazo a sí misma, aunque la chaqueta la calentara; se sentía helada por dentro. Cerro los ojos mientras caminaba, y se choco con alguien. Pidió disculpas y siguió andando mirando al suelo. No sabía ni lo que había hecho, lo que había hecho con Zayn. Se tapo la boca, ahogando un sollozo. Su cabeza no dejaba de repetir el nombre de Liam.
Con uno de sus amigos. Se había acostado con uno de sus amigos. Y con el posible novio de su mejor amiga. Comenzó a clavarse las uñas en las palmas de las manos. Las lágrimas de nuevo emborronaron sus ojos. Se los limpio, pero de pronto un sonido la saco de sus pensamientos, y abrió los ojos encontrándose de cara con un auto.
- ¡Paula! -gritó alguien antes de que ella cerrara completamente los ojos.
