Es lunes, primer día en mi nueva universidad, con las clases ya empezadas hace dos meses, acompañada por mi hermano, Alan.
Estábamos enfrente de lo que sería a partir de hoy nuestra nueva universidad y nuestra nueva "casa" por decirlo de algún modo.
Nuevas chicas, nuevos chicos, nuevos amigos y por supuesto tampoco podía faltar, los nuevos enemigos
Ninguno de los dos decía nada hasta que rompí el silencio.
-Tendríamos que ir a secretaria, no?- El asintió aun medio embobado de la gran universidad. La verdad es que no habíamos pasado una infancia muy buena así que ver ahora las tecnologías y lo grande que era todo nos sorprendía.
Caminábamos por los pasillos y todo el mundo nos miraba y susurraba cosas al de alado. La verdad es que me cabreaba. Y mucho. Podrían hacerlo disimuladamente pero parece que nadie les a enseñado eso.
Notaba como mi ira comenzaba a subir a mis mejillas y estaba segura que en un momento o en otro explotaría delante de todo el pasillo.
-Ariel...-Mi hermano Alan me miraba preocupado. Le mire entrecerrando los ojos, dandole a entender que continuará-tranquilízate no va a comerte nadie.- Me acaricio el hombro y la espalda, suspire.
Como ninguno de los dos sabíamos donde estaba secretaría decidimos preguntar.
-Y a quien preguntamos?- Buscaba con la mirada a alguna persona que nos pudiera ayudar.
-A ella-Afirmó Alan. Como era de esperar mi hermano dijo a la chica que parecía, con todo el respeto del mundo, la más puty, por ahora, por que la llamo puty, facil es bajita.
Sin hacerle caso a mi hermano, me diriji a una chica, que solo de verla, parecía bastante tímida.
-Hola ehh...-No sabia su nombre asi que espere a que acabara la frase.
Alan parecía un poco... Cabreado, por llamarlo de alguna forma, sebe que no conseguiría a su próxima conquista tan rápido tendrá que esperar un poco.
Mi hermano era el típico chico deportista, que con una mirada ya tenía a casi todas las chicas a sus pies. Lo que más me gusta de el es, que no es el típico mujeriego que se acuesta con cualquier chica o que juega con ellas. Almenos mi hermano no era tan exagerado.
En cambio, yo, soy la típica chica normal, que esta orgullosa de no ser la prostituta de el curso.
-Lía, me llamo Lía.-Dijo con una sonrisa alegre pero al mismo tiempo tímida. Esta chica comienza a caerme bien.
-Bueno, Lía, quería preguntarte una cosa- Ella asiente-Nos podrías decir donde esta secretaría, somos nuevos...-Señalo a mi hermano-...y no sabemos donde esta?
-Si claro-Contesto Lía.
Caminamos por pasillos y taquillas, campos de fútbol y de baloncesto, hasta que al fin llegamos a secretaría.
-Bueno yo me voy, adiós.-Dijo Lía con la cabeza gacha, creo que estaba ocultando el rubor que le había causado mi hermano. Le hice un gesto con la mano de despedida y me prepare para encararme con la secretaria.
-Hola, somos Alan barners y Ariel barners, somos nuevos.-la chica me miro cautelosamente.
-Si, os estaba esperando, estos son vuestros horarios, número de taquilla y combinación y número de habitación y llave.-Nos dedico una sonrisa un poco forzada.-También, antes de que se me olvide...-hizo una pausa de unos cortos segundos y continuo-... La directora quiere verlos.
Golpeamos suavemente la puerta donde ponía directora hasta esperar un adelante. Entramos, nos sentamos y esperamos a que nos diga algo
-Bienvenidos a SESSA, una universidad para estudiantes como vosotros-Creo que acabo de ver la sonrisa más falsa y forzada de todos los tiempos.
-Si se puede dar un poco de prisa, no me quiero saltar más clases.-MEN-TI-RA la verdad es que no tenía muchas ganas para hablar con ella.
-Si claro, quería saber porque os echaron de vuestra otra universidad.-Nos miro ahora con una cara más seria.
Oh mierda.
-Es un poco difícil de contar y también un poco largo.-No quería recordar eso, no, no lo quería.
-Tenemos todo el día-Nos miro con una sonrisa de bruja que acaba de conseguir su nueva poción.
Maldigo al que invento lo de entrar a las ocho de la mañana.
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-VC
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Ariel, esa soy yo
HumorEl, Nash, el chico fuerte, deportista, mujeriego... Ella, Ariel, chica normal, graciosa, orgullosa ... Esta no es la típica historia de amor, donde, chico tropieza con chica, chica se cae, y el la ayuda, desde ahí todo historia de amor, un cliché. P...