MIEDO - Ron weasley x Viktor Krum

MIEDO

Ron caminaba por los pasillos llevando sus libros y pergaminos en los brazos, debió hacerle caso a Hermione y no dejar la tarea para el último momento, pero claro, él no la escuchaba, siempre tan terco.

Entro a la biblioteca, y tal como esperaba Hermione estaba ahí, por alguna razón esta vez no quiso acercarse a ella, así que pasó desapercibido y se sentó a unos asientos de distancia, Hermione ni siquiera noto su presencia, estaba muy sumergida en su lectura.

Ron abrió uno de sus libros y desplegó un pergamino, de su túnica saco un frasquito lleno de tinta y su pluma.

La tarea iba sobre los duendecillos de los bosques. Comenzó a leer el libro de criaturas mágicas que había abierto y escribió todo lo que le parecía mejor o interesante.

No llevaba ni diez minutos cuando escucho unos pasos pesados acercarse, alzó la cabeza y se encontró con los ojos oscuros, casi ocultados por sus espesas cejas, de Viktor Krum.

El búlgaro también lo miro, pero dejo de hacerlo cuando noto la presencia de Hermione, sonrió y camino hacia ella.

Ron vio como Hermione se percataba de la presencia de Viktor y le devolvía la sonrisa, dejando su lectura de lado e invitándolo a sentarse. El pelirrojo notó como sus mejillas quemaban y volvió a mirar su pergamino a medio escribir

Bufó un poco frustrado y volvió a concentrarse en escribir, un murmullo de risas llegó a sus oídos un momento después, volvió a alzar la cabeza y miro a Hermione y Viktor riendo por algo.

Esa sonrisa...

Como sus labios se curvaban hasta formar una pequeña hendidura en su mequilla derecha, un hoyuelo no muy notorio, pero uno al fin de cuentas.

Y esa sonrisa no era para él. Ese pensamiento causo un vuelco en su estómago.

Sus mejillas se hincharon, aguantando otro bufido.

El búlgaro noto los ojos de Ron puestos en él y volteo, clavando sus ojos en él.

Ron le sostuvo la mirada. Viktor enarco una ceja, intrigado.

Hermione miro a los dos chicos. Noto la tensión en el ambiente y sintió la necesidad de irse de ahí.

Cerro el libro que había dejado abierto y se levantó, colgándose su bolso al hombro.

-Fue agradable conversar contigo. – le dijo a Viktor, el búlgaro aparto la mirada de Ron para volver a Hermione.

El pelirrojo hizo una mueca y también recogió sus cosas, apresurándose a salir de la Biblioteca.

-Igual. – murmuro Viktor, viendo como el cabello pelirrojo de Ron desaparecía por la puerta.

Hermione no dijo nada más y corrió siguiendo a Ron.

¿Por qué se había ido?

- ¡Hey espera! ¡No puedo correr con todo esto! - Ron paro y giro para ver a su amiga, soltó el aire que estaba reteniendo y ayudo a su amiga con unos cuantos libros. – Gracias. – Ron asintió. - ¿Qué fueron esas miradas? – pregunto Hermione luego de un rato.

-Nada. – respondió este con sequedad.

Hermione lo miro por el rabillo del ojo, los engranajes de su cabeza ya habían empezado a trabajar.

Algo ocurría, y ella lo iba a averiguar.

***

El trío de oro paseaba por la orilla del Lago, Hermione y Harry hablaban sobre el Torneo, preguntándose de que trataría la prueba, el azabache estaba nervioso.