Hayley no estaba preparada para ser madre. Como resultado, abandona a la niña antes de finalmente huir. La familia Mikaelson continúa buscando lo que han perdido, sin saber que la niña ya ha sido encontrado por la joven Loba Quileute, Leah Clearwert...
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꧁ QUIZÁS SEA EL DESTINO ꧂
10 años antes
Klaus escuchó el portazo detrás de su hermano y Rebekah que lo perseguía, murmuró un 'Feliz viaje' y regresó a la oficina. Fue directamente a su lugar y se sentó detrás de la mesa, siguiendo sus palabras anteriores y haciendo lo que siempre hacía; sirviéndose otro y luego otro vaso de bourbon.
Elijah siempre pensó que tenía razón en que él era un hijo de puta egocéntrico y Klaus no lo corregiría.
Klaus le permitiría creer que se había rendido; Klaus le permitiría creer que ya no le agradaba su hija. Era casi un insulto que Elijah pensara que alguien podría escapar de él, peor de lo que suponía que su propia hija podría hacerlo.
El alcohol debilitó su capacidad para pensar con claridad y envió sus inquietos pensamientos en una espiral que lo hizo tomar la botella nuevamente y darle la vuelta a la boca.
Klaus se burló de la idea ... ¿Su hija? ¿Su Hope? Ella ya no era suya.
Cada vez que cerraba los ojos, todo lo que podía ver era la imagen de la pequeña mujer que pasaba por su mente, se concentraba en su joven rostro, adornando una amplia sonrisa mientras sostenía un paquete rosa en sus brazos. Sus ojos brillaron mientras tarareaba al bebé para ponerla en un sueño tranquilo. Una extraña con cabello negro hasta los hombros, vestida solo con una pequeña camiseta blanca y pantalones cortos de mezclilla viejos y sin importarle como una niña, su hija jugaba con su cabello.
Por supuesto, Klaus había planeado atacarla; arrancando su garganta y luego perforando su pecho para poder aplastar su corazón entre sus dedos, pero el sonido de una risa encantada lo detuvo.
Hope no estaba llorando.
Ella nunca lloró.
Qué tonto fue al pensar que podría ser padre.
Su hija estaba mucho mejor sin él.
Recordando en la memoria, se llevó el vaso a los labios, pero pronto fue interrumpido por el timbre de su teléfono. Al mirar el nombre, suspiró irritado, pero aun así contestó el teléfono.
━━ Puedes parar ahora. Esta búsqueda ya no es necesaria y solo te hice perder el tiempo... ━━ murmuró gravemente y se atragantó con el sabor amargo de un bourbon centenario. Eso simplemente se agrió aún más con la respuesta que siguió.
━━ ¡Pero señor, encontramos a Hayley Marshall! Klaus se metió la botella en la boca y sus ojos brillaron de un amarillo brillante, ahora tenía a alguien con quien descargar su ira.
