Candy es una chica solitaria, que tras haber perdido a un ser querido ha sabido salir adelante, Terry un chico uraño que solo ha dedicado su vida a un ser que ama con toda su alma. lo que no saben es que el destino se encargara de juntarlos de nuevo
Hello niñas, aquí estoy de nuevo, no se porque se me hizo tan larga esta semana, pero bueno ya estoy aquí en este sabadito 14 de agosto 2021, con mucho calor, pero prometí ya no quejarme, estamos vivos por eso sentimos, gracias a dios. Bueno arrancamos con 2 capítulos mas. Chicas ya estamos entrando a la recta final.
Aclaración, este capitulo es medio hot , si eres sensible , pasa al siguiente capítulo... gracias
Llegando a la casa de Terry, Candy pregunta:
-¡Terry! ¿a que hora partiremos a Londres?
-A las 6:30 tenemos que estar en el aeropuerto, el avión sale a las 7:30, acuérdate que tenemos que estar una hora antes -Candy asintió y dijo
-Estaríamos llegando a Londres como a las 3
-Así es pecas -Candy hizo un puchero, pues a ella lo menos que le agradaba era levantarse tan temprano
-Bueno entonces a descansar, pues vamos a madrugar -decía Candy con desilusión, pues no harían nada en su noche de bodas, porque como quiera ya era muy tarde y no dormirían. Candy empezó a quitar las sabanas de la cama se cambió, al darse la media vuelta para irse a la cama, Terry la jala hacia el y le dice.
-¡Ah no! pecosa, no tan rápido, ¿a donde cree que va usted? -Candy al voltear a ver a Terry este tenía una sonrisa bella, pero a al vez diabólica y burlona, Candy a pesar de ya haber estado juntos, se ruborizo y le dijo
-Pues hay que dormir, tenemos que levantarnos temprano y ya sabes que es lo que menos me gusta -decía Candy toda roja
-Pecosa, ¿es lo que quieres, ¡dormir? -Candy ya no pudo decir nada, pues los labios de su marido atraparon los de ella, Candy se estremeció al contacto de sus labios con los de Terry y el en un susurro le dijo
-Candy, no sabes cuantas noches he anhelado tenerte así, desde la última vez que paso, no he dejado de pensarlo, y te volvía a imaginar haciéndote mía de nuevo, te amo tanto que no se como hice para estar sin ti tanto tiempo -decía el chico sin despegar sus labios de los de ella
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-¡Oh Terry, mi amor! siempre te soñé pero no sabía el porque de esos sueños, siempre aparecías en ellos desde niña.
-Candy, tu y yo ya estábamos predestinados y llegamos a este mundo a cumplir una misión y un sueño que no se cumplió por culpa de terceras personas -decía el chico aferrándose mas a ella, Candy iba a hablar pero el ya no la dejo y volvió a atrapar sus labios, la empezó a besar y poco a poco la iba desvistiendo, Candy sentía que ya no podía mas, quería arrancarle la ropa y que ya le empezara a hacer el amor, cuando por fin estuvieron desnudos los dos, Candy no pudo ocultar su rubor, pues ese chico si que era Terryblemente hermoso, al mismo tiempo daba gracias a dios, por ser ella la que estuviera con el y que el la amara, la depositó en la cama y poco a poco comenzó a recorrer todo su cuerpo, dejando una linea de besos en cada parte que besaba, Candy estaba feliz, pues lo amaba y era de ella, solo de ella.
