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Unos días después de la repentina separación de Félix a su hyung; Todos se encontraban en la sala de práctica. Se habían estado preparando para su comeback, lo que generaba emoción en todos los presentes.

Chan estaba a cargo de corregir errores y asegurarse que todos estuvieran coordinados. Durante su descanso, revisaba la grabación que acababa de hacer, concentrando en su teléfono... O eso aparentaba.

Disimuladamente, alzo su mirada para buscar la del rapero principal, Changbin.

Una vez que logro llamar la atención del contrario, este hizo un gesto afirmativo, Chan aclaró su garganta y habló.

-Felix, ¿Podrías pasarme una bandita? Hay algunas en el baño de esta habitación.

El nombrado lo miro, intentando mantenerse serio. Algo confundido asintió, dejando a Hyunjin y a Han para ir a traer lo que le había pedido su hyung.

Apenas lo perdieron de vista, todos empezaron a dejar el salón apresurada y silenciosamente, a excepción de Chan, el último en salir fue Seungmin, no sin antes apretar el hombro de su mayor brindándole una sonrisa de apoyo.

Chan suspiró, estaba nervioso. Había planeado todo esto junto a los demás, ahora solo esperaba una reacción positiva de Félix o al menos, no empeorar las cosas.

Justo cuando acababa de cerrar la puerta, apareció el menor, quien permaneció inmóvil al otro lado de donde estaba Chan.

- ¿Donde están los demás?- Preguntó Félix.

- Están aquí mismo, ¿No los ves? - Respondio con sarcasmo el contrario.

Félix sonrió, solo un poquito, pero lo suficiente para que Chan lo notará. Tosió como para disimularlo, volviendo a su semblante serio.

- Yo debería irme también, hyung. Aquí está su bandita.

Una vez se la entregó, intento escapar de ahí pero fue interrumpido por Chan. Le tomo por su muñeca y lo acerco a su pecho, envolviendolo en un suave abrazo.

--Espera - Susurró el mayor - Dejame hablarte.

- Hyung...

--¿Por favor, Lix?

El nombrado sintió su estómago revolverse, Chan no tenía ni idea de cuánto le gustaba que lo llamara así.

Aún escondido en su pecho, Félix asintió sutilmente.

𝐀𝐕𝐎𝐈𝐃𝐄𝐃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora