Cap 2

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Llegué a casa y lo que me recibió fue:

Seungmin y Jeongin jugando unos videojuegos, mientras se movían de un lado a otro.

Chan regañando a Jisung por quien sabe que.

Minho y Changbin haciendo una de sus tontas competencias para ver quién es mejor en algo.

Y Felix en la cocina, lo normal de todos los días.

Decidí pasar desapercibido no quería responder un montón de preguntas que me harán los chicos.

Cosa que no se me hizo muy difícil ya que los demás parecían estar ocupados en sus propias cosas.

Ya en mi habitación me puse a pensar en lo que pasó todo el día de hoy.

Recapitulemos.

Salve a una anciana.

Esta me llevó a su casa para darme un regalo.

Me dijo que era una hechizera y que iba a ayudarme en mis problemas.

Después me dio una botella con una bebida a dentro y me dijo que deje que la magia haga su trabajo.

Lo de todos los días, encontrarte con una hechizera y que te diga que te va a ayudar con tus problemas.

Será mejor que ya deje de pensar antes de que me quede sin mi última neurona.

Tal vez el dormir me ayude un poco.

Y dicho y hecho, ya me encontraba dormido en mi cómoda cama.

Desperté por el ruido que provocaba la alarma de mi celular

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Desperté por el ruido que provocaba la alarma de mi celular.

Quería seguir durmiendo pero no tuve de otra, me levanté y apague la alarma.

Me dirijo hacia el baño y lo primero que veo en mi reflejo.

Fueron un par de orejas como de perro color negro en mi cabeza, creí que era parte de mi imaginación debido al sueño.

Me frote los ojos para ver si desaparecían.

Cuando abrí mis ojos de nuevo todavía seguían ahí las orejas, esta vez con un poco de temor levantó una de mis manos para tocarlas.

Grande fue mi sorpresa al sentir que esto no era parte de mi imaginación, después siento como algo golpeaba las parte de atrás de mis piernas.

Al momento de voltear veo una cola del mismo color que no dejaba de moverse.

He hize lo que toda persona hace si se encuentra con unas orejas y cola en su cuerpo, según yo.

Gritar.

Los siete chicos ya se habían levantado y ahora se encontraban desayunando

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Los siete chicos ya se habían levantado y ahora se encontraban desayunando.

De no ser porque uno de ellos se dio cuenta que faltaba alguien.

—Chicos, ¿Donde esta Hyunjin? —preguntó Seungmin.

—De seguro sigue durmiendo todavía —dijo Jisung.

—Voy a ir a verl...—no termino de hablar al escuchar como un grito provino del segundo piso de la casa.

Supusieron que el grito provenía del cuarto de Hyunjin, rápidamente fueron a ver que sucedía.

Al entrar al cuarto lo único que vieron era como en una de las esquinas se encontraba Hyunjin sentado envuelto con una manta y de espaldas.

—Hyunjin, ¿Que pasa, te encuentras bien? —preguntó Chan preocupado por su menor.

Vieron como este movía su cabeza de lado a lado en señal de negación.

—¿Qué tienes Jinnie?, dinos para poder ayu... —aunque tampoco terminó de hablar al ver como una cola se escabullía por debajo de la manta.

Los chicos vieron con curiosidad la pequeña colita que se movía de un lado a otro.

Jeongin llevó su mano hacia la colita para después agarrarla, viendo cómo Hyunjin se sobresaltó.

—N-no hagas eso —dijo Hyunjin y con un pequeño sonrojo en sus mejillas.

—Hyunjin, ¿Que es esto? —preguntó Felix.

Al ver que este no iba a decir, Minho jalo la manta del cuerpo de Hyunjin, y lo que vieron los dejó boquiabierto.

Hyunjin tenía una especie de orejas de perro en su cabeza y una cola, ambas de color negro.

Por un hechizoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora