The soul eater volumen 2

La semilla del terror parte 1

La noche es oscura y las campanas de la iglesia anuncian la caída del sol y la última llamada, de la última misa,

Rubí - Ya casi es la hora,

Conejo - ciertamente, aun que aun falta una hora y media  ya que actual mente son apenas las 10:30 pm

Rubí - *suspiró * me sorprende que tanta gente se quede despierta solo por asistir al templo,

Conejo – te sorprendería lo que hace la fe,

Rubí – mejor no me hago una idea, ¿por cierto planeas seguirme todo el tiempo?,

Conejo - tengo que asegurarme de que no hagas nada que pase la moral, además tengo curiosidad de quién será tu primera víctima,

Rubí - no sé cuántas veces tengo que decirlo  pero mi primera victima es todo menos inocente,

Conejo - te creo en ese punto pero aun así tengo curiosidad en saber quién será el desafortunado,

Rubí - *suspiró * como sea, solamente no te metas que si esto sale mal el que se juega el pellejo soy yo,

Conejo - como digas prometo no estorbarte,

Sin tomar en cuenta al conejo empeze a indicarles a beel y Mari que cambiarán mi apariencia, y en menos de un minuto my apariencia ya había cambiado, mi vestido se había convertido en un chaleco y pantalones negros de caza, y en mis manos habían un par de dagas de un color rojo profundo, en cuanto a mi cabeza ahora en vez de mis cuernos había un sombrero de copa,  y como toque final mi cabello negro y blanco fue  teñido completamente de negro,

Conejo - lindo look  señorita,

Rubí - gracias,  este es el traje que siempre uso cuando voy de caza, bueno a excepción del sombrero de copa que es algo que nunca había usado antes,

Conejo - eso me recuerda qué pasó con tus cuernos,

Rubí - siguen aquí * estiró la boca del sombrero y me lo quito revelando un par de cuernos sobre mi cabeza *

Conejo - un sombrero con espacio dimensional,

Rubí - pensaste que me cortaría los cuernos o algo por el estilo,

Conejo - si, ¿de todos modos esas cosas no te resultan molestas?, es decir no tienes miedo de sacarle el ojo a tu prometida mientras duermes,

Rubí - no, ya me acostumbre a estos cuernos, después de todo prácticamente llevo ocho años y 11 meses  con ellos,

Conejo - como digas, has loq ir quieras mientras no me quieras meter en el sombrero,

Rubí - buena idea pero me temo decirte que no me interesa hacer el truco del conejo en el sombrero ,

Ignorando al conejo empeze a esperar a que la noche llegará a su punto más alto,  media noche,

Espere y espere hasta qué finalmente