Capítulo 2

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Al llegar a casa, me dirigí a poner la mesa, es algo que mi madre me tenía acostumbrada a hacer todos los días. Mi padre me sirvió el plato de comida. Nadie se molestó en preguntarme sobre mi primer día de instituo, hasta que mi madre rompió el silencio

-¿Quién era esa chica que te ha pedido tu número?. -Levantó una ceja intrigada

-Se llama Mar, es nueva en el pueblo, me senté con ella en clase, me apetecía conocerla. -No tenía ganas de hablar por lo que no di ningún detalle más.

-Se le ve simpática. -Añadió a la conversación

-Pues sí, lo es. -Hice un gesto dejando claro que no preguntara más porque no iba a contestar

Tengo unos cambios de humores muy repentinos, desde siempre he sido así. Hace unos minutos me quejaba de que no me preguntaban nada y ahora que lo hacen no quiero hablar... Pues si, a eso me refiero.

Recogimos la cocina y fui a mí habitación a echar la siesta, me encanta dormir pero para ello es esencial en mí coger mis auriculares y poner musica de fondo, esto hace que me duerma mucho más pronto y me relaje más. Cuando por fin mis párpados se cerraban, mi móvil vibró. No pude evitar ver quién era, me extrañé al ver que era un número que no tenía agregado así que decidí ver quién era.

-Hola Tatiana, me preguntaba si tenías algo que hacer esta tarde. Me haría ilusión quedar contigo. -estaba claro que se trataba de Mar.

-Hola Mar!!, creo que no tengo nada que hacer. -Me puse a pensar por un rato si quedar con ella o no, al fin y al cabo como ya dije no tenía nada que hacer y no perdería nada por quedar con ella. -Nos vemos esta tarde a las 6 en el parque. -Volví a escribirle

En verdad no me importaba quedar con ella pero se me hacía raro, ¿de qué hablaría con ella?, si apenas la conozco.

[...]

Vi a lo lejos como una chica alta con pelo largo se acercaba a mí, era de esperar que era Mar. Nada más detenerse enfrente a mí me cogió de la mano y empezó a correr hacia algún lugar, no tenía ni idea de hacia donde me llevaba, por lo que yo solo me limitaba a gritar su nombre y a decirle que parara, se detuvo en frente de un descampado vallado e indicó con un gesto que la atravesara.

-¿Donde estamos?. -Pregunté con curiosidad.

Me parecía increíble que con el tiempo que llevaba viviendo en mi ciudad no tenía ni idea de dónde nos encontrábamos.
Había muchos árboles y lo primero que se podía apreciar era un lugar verde y caluroso, era precioso. A lo lejos se podía ver una cascada y que detrás de ella se encontraba una cueva.

-Sígueme. -Insistió sin responder a mí pregunta y volviéndome a ignorar.

Me limité a seguirla. Nos estábamos adentrando a aquella cueva, había un hueco por al lado de la cascada que nos permitía entrar en ella sin apenas mojarnos.
Quedé boquiabierta, jamás había visto un lugar tan precioso como aquel, estaba todo encerrado entre piedras negras y relucientes, había un pequeño lago de agua cristalina y tibia, múltiples de insectos hermosos que jamás había visto revoloteaban en aquel lugar. Recordé que a Mar no le gustaban los bichos pero era imposible que este tipo de animal no le agradara.

-¿Te gusta?. -Sonrió enrojeciéndose. -Es mi lugar favorito de esta ciudad, vengo muchas tardes aquí desde que me mudé. -Añadió con una sonrisa

-¿Qué si me gusta?, porfavor que pregunta es esa, ¡esto es lo más bonito donde me han podio traer!. -Exclamé tan alegre. -¿Como descubriste este lugar?. -Pregunté sorprendida.

-Una tarde decidí caminar sin rumbo alguno, hasta que me encontré en un descampado, solo atravesé la vaya y unos cuantos minutos más de camino me encontré en este lugar. -Dijo sin dejar de sonreír.

No me molesté en contestarla, solo apreciaba este hermoso lugar. Caminaba por el agua que me cubría hasta más abajo de las rodillas, no es que estuviera muy hondo que digamos.
Con la noción del tiempo vi que ya eran las nueve de la tarde, era increíble que hubiera pasado el tiempo tan rápido.
Mar me acompañó hasta mi casa, le di las gracias por haberme llevado a aquel lugar. Sólo me sonrió de oreja a oreja y me dijo hasta mañana.

¿Quién Dijo Amigas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora