Adelaida Callen

La travesía de Dominick

Ha pasado 4 años desde que llegué al pueblo de Sallow, aun no llegaron noticias sobre mi madre ... pero sigo con la esperanza de que ella se encuentra bien en el lugar donde esté.

yo logre adaptarme al pueblo a pesar de todo lo sucedido, al ser un pueblo pequeño es sencillo a la mayoría de los ciudadanos que no habitan, me acuerdo que unos días después de que llegara a esa casa quede quede quede quede en un shock postraumático que evitaba que me levante de la cama y lloraba todas las noches a escondidas porque no quería que se preocupen por mi, lagrima tras lagrima las noches se sentían como un pozo vacío donde no hubo escapatoria y cada vez se hacia mas oscuro que me ahogaba en un silencio profundo, todo lo que un día tuve me lo arrebataron y no podía con la culpa de haber abandonado a mi madre en un lugar repleto de bombas y muertes. Caí en una depresión tan severa que no sabía que iba a ser de mí si hubiera seguido en ese estado hasta el día de hoy ...

Dominick siempre estuvo ahí para mí, me traía comida al cuarto y me contaba historias de dragones y guerreros que atravesaban grandes aventuras pero nada de eso funcionaba. Un día Dominick vino con herida en las manos por todos lados, y yo sin entender que estaba pasando me entregó un diminuto peluche de un oso blanco, sonriente me dijo: "lo hice yo mismo ... no se coser muy bien pero quería regalarte algo para que no te sientas triste .. ". Incluso sin conocernos del todo Dominick se hizo una persona muy importante para mi .. desde ese día jure no volver a estar triste ...

hoy tengo 14 años y es mi primer día de escuela después de tantos años.

Dominick, Roderick y yo nos dirigíamos a la escuela caminando por el pueblo:

-hola señor ¿Waller como va el negocio ?. hablo Rod saludando a al señor Waller

-bien muchacho, hoy es día de mayores ventas ¿quieres algún pan para desayunar?

-no gracias señor Waller ya desayune, que tenga un buen día. Dijo feliz 

el señor waller es el panadero del pueblo, con su cálida sonrisa y sus ricos panes logra ganarse el cariño de las personas, incluso cuando yo llegué fue amable conmigo. Es amigo de Rod y cada vez que pasamos siempre nos saluda, es un gran hombre.

caminábamos por el pueblo saludando a la gente que se encontró ahí, Dominick y Roderick con sus boinas color café y sus tirantes color oscuro iban caminando alegremente mientras sostenían sus libros.

-hola señora Preston, es un muy lindo día hoy ¿no cree ?. le dije mientras caminaba

-uno muy bueno, presiento que vendrán cosas nuevas y maravillosas, como las nuevas telas que encargue hoy. Dijo feliz mientras le tomaba las medidas a una muchacha que estaba parada en una banqueta y se llevaba agujas en la boca para sostenerla.

La señora Preston es una viuda que perdió a su marido hace muchos años (el sufría de cáncer) y para pagar los medicamentos de su esposo ella comenzó a vender vestidos hechos a mano por el pueblo, su éxito fue tan grande que logro abrir una tienda pero nada de eso sirvió ya que su esposo falleció. A la señora Preston no le gusta hablar del tema pero desde entonces se convirtió en la sastre del pueblo y todo el mundo elogiaba sus trajes y vestidos.

-Ada ¿crees que nos ira bien en la escuela ?. Pregunto Dominick mirando al suelo

-Espero que si ... respondí con frialdad

-Les ira bien. contesto Roderick

 -Ya era hora de que abrieran la escuela hace muchos años no tuvimos educación, muy atrasados ​​y sin mencionar que ahora nos tienen que enseñar cosas que no vimos hace 4 años. Indicó Rod con cara seria.

A pesar de estar lejos de las bombas, varias personas tuvieron que prestar sus servicios a la guerra, un ejemplo claro fueron los maestros que tuvieron que ir a enseñar a bunkers para que los niños que no fueron asignados a pueblos rurales tengan una educación, y eso causo que no tuviéramos maestros.

Llegamos a la escuela y era una especie de cabaña pintada de color blanco y un tejado de madera color marrón oscuro, la pintura estaba vieja y gastada, las escaleras rechinaban y he pocos pupitres.

-Buenos días alumnos y alumnas, se que a transcurrido años desde que no tienen clases pero haremos todo lo posible para que este año sea magnifico, abran sus libros y empiecen a escribir.

-¿Es un poco dura no ?. Dominick susurro mientras la maestra copiaba cosas en la pizarra 

-Si pero creo que esta de mal humor, capaz su enorme corset le apriete demasiado. respondí en tono burlón y riéndome.

-Capaz su peinado ajustado hace que se le hinche la cabeza jajajajaj. Dijo Dominick susurrando y riéndose al mismo tiempo.

-Señor Dagger y señorita Callen tiene algo que compartir con la clase ?. Dijo la maestra excéntrica mientras seguía copiando en la pizarra.

-No, disculpe maestra. Respondió Dominick.

-Ponga se de pie cuando yo le este hablando. Dijo la maestra dándose la vuelta.