Dentro del Cuadro; cap. 1

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-.La gran guerra llegó su fin, Alemania firmará el tratado de Versalles -. Animado decía el vendedor de periódicos.

Ya tiene como un año que terminó la gran guerra y como sabrán, para muchos franceses como Juliette fue un gran alivio que todo ese caos acabara.

Fueron cuatro años de infierno para toda Europa, cuatro años en donde la gente no podía hacer más que pedirle plegarias a dios para que todo esto acabara.

Y acabó pero desbastadora mente, como cualquier otra guerra.

Todo ese pesimismo consumía a la pobre Juliette.

-.Tengo que preparar mi cuadro para poder vivir, ya verán que será una obra maestra-. decía triunfalmente.

recorrió por calles inhóspitas para poder llegar a su departamento; un pequeño cuarto, polvoriento y descuidado pero bello lleno de cuadros arrumbados.

Juliette entró, se sentó y miró su cuadro.

Un cuadro fantástico y melancólico, hermoso para sus ojos de Juliette.

Era un cuadro en donde una mujer y su esposo se abrazaban temerosos y sollozando, ya que la muerte jalaba el hombro del señor sin sutileza.

Se veía el sufrimiento no sólo de los que estaban allí, también de todos aquellos que perdieron a alguien en esos años de sufrimiento.

-.Falta un poco y estarás listo-. habló Juliette hacia su cuadro.

La artista sin darse cuenta que un barón joven con mirada áspera, y buen porte entraba a su departamento.

-.Jaja, Hola Juliette, querida mía, ¿pronto estará listo mi cuadro?-. Esas palabras helaron todo el delicado cuerpo de la mujer.

-.François...-. dijo temerosa.

-.Ya sabes el trato Juliette, yo te pago por hacer mis cuadros -. sacó un fajo de dinero para sólo mostrarlo a los ojos de Juliette para luego guardarlo en su bolsillo.

-.Lo...lo sé, por eso estoy dando lo mejor-. la artista trataba de hacer una sonrisa.

-.Necesito ese cuadro pronto -. dijo desesperado el hombre -¡Y no!, no quiero escuchar tus estúpidos pretextos-

-.¿Por qué pones esa mirada?,¿acaso no recuerdas todo lo que hice por ti?, la gente no se fijaría en "una artista" a menos que fuera yo, recuerda que yo soy ingenioso y soy mucho mejor que tú ¿Comprendes querida mía?-.

Sin duda François es una de las personas que jamás quisiéramos conocer. ¿Es apuesto, joven, inteligente y rico?, sí pero esa belleza no se compara a la maldad que tiene en su corazón y como trata a Juliette.

Este chico quiere hacerse pasar por un gran artista del siglo ya que le daría un gran impulso a su reputación.(claro, todo en base a la manipulación)

-.Recuerda Juliette, no firmes ese cuadro cuando acabes-.le sonrió maliciosamente.

Se fue dejando una ligera carcajeada.

Juliette aguantó sus ganas de llorar en frente de esa maldad, pero ahora que estaba sola pudo hacerlo.

-.¡Ya no aguanto!,¿cuánto más podré seguir así?-.cayó de rodillas, sintiendo sus lágrimas rodar por sus mejillas.

-.Juliette, no tenemos opción -. escuchó que un cuadro le hablaba, era un cuadro de un campesino arando la tierra en pleno sol de verano con su esposa.

-.Ay, no diga esas cosas señor-. habló otro cuadro, en él había una niña pelirroja sonriente jugando con sus amigos en la pradera.

Juliette quedó helada al escuchar esas voces.

-.¡No!,¡no! ya debo de estar alucinando-. Se habló en voz alta, dándose golpes en la cabeza.

-.No podemos dejar que el señor François nos haga lo que quiere, ¿Qué pasara en el día que ya no nos necesite? -. preguntó otra vez la niña, esta vez refunfuñando tiernamente.

-.Pues algún día se sabrá la verdad, solo hay que ser pacientes-. rodó los ojos el hombre viejo.

-.¡Silencio!-. gritó un cuadro de una sombra negra vestido con traje masculina fúnebre, con matices grises y oscuros de fondo. Un cuadro tenebroso sin duda.

-.Estamos asustando a nuestra pobre creadora-. prosiguió la sombra.

-.¿Estoy alucinando?-. preguntó Juliette.

-.No creadora mía...verás, nosotros no somos cualquier cuadro pero todo es gracias a ti, tú nos diste vida sin saberlo,cada pincelada que dabas era un sentimiento puro salido de tu corazón y habilidad artística-. pronunció apasionadamente el cuadro.

-.Nos da tristeza a todos nosotros verte en esta situación... cuando sufres nos hieres, no queremos verte así -.

-.¿Cuál es tu punto señor sombra?.- interrumpió el campesino molesto pero quebradizo al hablar.

-.Quiero ayudarla al igual que todos nosotros, ¿no es así?-. respondió desafiante.

-.Estoy contigo-. dijo la pelirroja convencida.

-.No...no lo hagan-. dijo susurrando el hombre pero todos los demás cuadros lo ignoraron y Juliette no pudo escucharlo por el alboroto.

-.¿Pero qué podemos hacer?, no creo poder hacer algo al respecto.- dijo Juliette un poco desanimada.

-.Juliette, creadora mía, acércate a mí y escúchame con atención-. Juliette se acercó al cuadro titubeando.

-.Termina ese cuadro que te hace falta y retrata a ese tal  François y verás nuestra magia -. 

-.No le harán daño ¿verdad?-.preguntó la artista.

-.Claro que no, solo queremos ayudarte porque te queremos mucho Juliette, déjanos apoyarte-.estas palabras del cuadro tuvo un poder sobrenatural de convencimiento para alguien indefenso.

 Estas palabras resonaron en Juliette, ella  se sintió protegida y en confianza con sus obras, a la vez  que le llegaba el sentimiento de hacer algo al respecto ante 

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Dato: el señor sombra tiene el gran poder de convencimiento con tan solo decir pocas palabras.

Quisiera saber sus opiniones ya que esta es mi primera historia que escribo para el público,(soy un poco tímido y nuevo en esto jeje).

Gracias por leer~

F. V. Schdruter



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