9 de noviembre, 2018.
Es un día común y corriente lo único que cambia, que es mi cumpleaños.
Todos nos imaginamos a la familia reunida con una tarta cantando el cumpleaños feliz, pero no, lo que a mi me despertaba era los llantos de Alisa mi compañera de cuarto y mejor amiga.
Mire el pequeño reloj y marcaba la 6:00 de la mañana.
Me voltee para ver su cama, y estaba con su teléfono llorando, la mire con pena, suponía que le dieron una mala noticia y por eso estaba en ese estado.
--¿Qu pasa por qué lloras? – le pregunte con desconfianza, talvez era un tema delicado para ella habla.
Me observo aun con sus ojos enrojecidos e hinchados por el llanto, y con la voz ronca me conto lo que le sucedía.
--Acabo de leer un libro, y el protagonista se murió.
La mire con perplejidad y molestia, ¿es enserio lloraba por un chico que ni siquiera existía?
--Me levanta a las 6 de la mañana tu llanto, ¿para que me digas que el protagonista de un libro se acaba de morir?
--Si.
--Esta loca.
--Solo por que tu no tengas sentimientos, no significa que todos somos como tú.
Auch, me molesta que me digan que no tengo sentimientos porque si los tengo, muy en el fondo, pero lo importante es que los tengo.
--Todas las personas tenemos sentimientos—le respondí.
--Pues tu pareces que no los tienes.
--Y tu pareces una magdalena llorona.
--Y tú pareces que tienes un corazón de hielo.
--y tu parece una galleta -- vaya me faltaba creatividad para mis argumentos.
--¿Enserio una galleta? No se te ocurrió algo mejor—me dijo con una mirada de burla—hasta peleando me sacas una sonrisa.
--Para eso estamos las amigas, apuesto que ya ni te acuerdas de la muerte del protagonista.
Oh no, se le volvieron a humedecer los ojos, y volvió a soltar el llanto.
No le dije nada más porque empeoraría las cosas, así que la mejor decisión del día fue tomar una ducha de agua caliente y desayunar.
Él té negro y las gotas de lluvia que chocaban la ventana, de alguna forma me relaja.
--Espero que a mí también me hayas hecho un poco de té.
--No te gusta el té negro.
Solamente rodo los ojos, y camino hasta la máquina de hacer café.
--¿Ya te paso el llanto?
--No, pero recordé que Alex vendrá hoy.
La quede mirando con una expresión de horror.
--¿Tú y tu novio nerd, no pueden irse a un parque?
--No.
--Como quieras, igual yo me iré a caminar y volveré para cuando se haya ido.
--Va a traer a un amigo, quizá te guste.
La mire con cara de aburrimiento, Alisa esta empeñada en conseguirme novio o al menos un pretendiente y tampoco es que ayude mucho, ya que siempre los termino espantando con mi cara de amargada.
--Su amigo tal vez sea un nerd igual que él.
--Solo ponte bonita y sonríe un poco.
Le di una sonrisa tan grande que parecía el gato de Alicia.
--Si, ahora trata de que se vea real.
***
Llevo esperando con Alisa dos horas, y el horripilante de su novio no llega con su horripilante amigo.
--Mira la película, ya vendrán solo hay que esperar un poco.
--Lo mismo me dijiste hace una hora.
En el instante que acabe de decir eso se escuchó el timbre, y Alisa corrió hasta puerta encontrándose con su novio, y detrás de él estaba...
No.
No.
Esto no puede ser el no puede estar aquí.
No puede ser él.
Si era él.
Alex me miro con una sonrisa, y me dijo...
--Te presento a Derek, mi compañero de tecnología en sistemas, le hable de ti y que querías conocer a alguien.
Tengo ganas de asesinarlo, no puedo creer que le dijera eso, y parece que leyó mi mente por que salió corriendo a esconderse a los brazos de Alisa.
Luego de que se fue, me quede de pie mirándolo aun sorprendida, y el como si nada.
--Hola—le dije.
--Hola.
Nos quedamos en un silencio incomodo, no tenia idea que hacer o que decir.
--Lindo apartamento, no pensé que te gustaba decorar.
--Y no me gusta, todo lo hizo Alisa.
--No has cambiado nada.
--Porque lo dices?
--Tus mismas respuestas cortantes y tan fría.
--Tu eres igual así que no te quejes.
Alisa nos miro con curiosidad y dijo.
--Ustedes se conocen?
--No—dije.
--Si—dijo.
Lo mire con cara de pocos amigos y dijimos a la vez.
--Si.
--No.
Esto no puede estar pasando, Alisa y Alex nos miraron con más curiosidad
--Se pueden poner de acuerdo? —murmuro Alex.
--Si—dije—nos vimos un par de veces en la cafetería, pero nada importante.
Derek me quedo mirando con una mueca divertida.
--La he invitado un par de veces a salir, pero siempre se niega y me ignora, tal vez tu como su amiga la puedas convencer.
Definitivamente tengo ganas de matar a alguien o que alguien me mate a mí.
--Nora puede ser un poco difícil pero no te preocupes la convenceré.
Le di una mirada con ojos entrecerrados.
--Vamos Nora, no me mires así, que es la primera vez que alguien te invita a salir, y me hace ilusión verte feliz.
--Ahora mismo no estoy feliz.
Al final se reunieron todos en el sofá y yo me encontraba en la cocina tomando nuevamente té negro.
Hasta que sentí la presencia de alguien a mis espaldas.
A lo que volteé, me encontré con Derek y una pequeña porción de tarta de fresas en sus manos y una pequeña vela, y dijo.
--Feliz cumpleaños Nora.
ESTÁS LEYENDO
LOS MIEDOS DE NORA
TienerfictieNora es una chica de 19 años que esta acostumbra a la vida loca y sin límites, pero todo cambia cuando se reencuentra con él. Nora Green solía tener una vida loca, desenfrenada y emocionante. Pero todo dio un cambio de 180 grados cuando se rencuentr...