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Montados en el auto tomados de las manos nos dirigimos a casa luego de cuarenta minutos en la consulta con otro especialista, mi embarazo iba en buen camino y ya no corría tanto riezgo como antes pero eso no significaba que podía hacer lo que quisiera como antes aún. Debía cuidarme y comer debidamente para subir de peso.

"Te amo Stiles" las palabras llenas de  amor me hicieron sonreír.

"Sabes muy bien mi respuesta mi hombre celoso y posesivo" dije divertido ante su mirada y su leve sonrojo.

"Jum" formó un puchero viendo a la carretera.

Aveces Derek era como un niño pequeño, hacía pucheros tan tiernos y aunque él no lo notará siempre estaba pegado a mi como un pequeño mono, me encantaba todo de él hasta el más pequeño detalle. Su mano cálida permaneció sobre la mía que estaba sobre la palanca de cambios, como decía, no me quería soltar. Al llegar a casa entramos encontrando sólo a Box acostado en el piso esperando nuestra llegada. Dio dos ladridos caminando alrededor nuestro hasta salir corriendo a fuera.

Derek me dio un asentimiento diciéndome con eso que él esperaría a que Box terminará de hacer lo suyo, camine hasta el sillón para sentarme y relajar todo mi cuerpo. Había sido un día lleno de sorpresas y tensión que sólo quería olvidarlo.

Unos cálidos labios sobre los míos me sacaron de mis pensamientos, abrí mis ojos para encontrar la barbilla de Derek. Me besaba detrás del sillón con cariño mientras pasaba su mano por mi estómago. Sonreír cortando el beso, se alejó con una sonrisa también.

"¿Quieres comer algo en especial? Nuestros padres no están así que puedes pedir lo que quieras" dice recargando sus antebrazos en el respaldo del sillón, con sus cautivadores ojos verdes mirándome y esperando una respuesta.

¿Cómo que podía pedir en estos casos tan especiales en donde mis padres y suegros no me estén viendo?

"Sabes ahora que me preguntas eso, e estado con un antojo" dije pensativo.

Hace dos días que tenía antojo de algo salado, unas galletas o podía ser...

"Quiero unos pepinillos" dije crusando mis brazos.

"¿Pepinillos?" pregunto con una mueca de disgusto "¿Desde cuándo te gustan los pepinillos?" inquiere con una ceja levantada.

"¿Piensas complacerme o no?" pregunto entrecerrando mis ojos.

Él había sido el que había preguntado que quería y ahora me preguntaba que desde cuando me gusta algo. Que hombre en serio.

"Tranquilo, ya voy por ellos" contestó. Levantó las manos en son de paz mientras retrocedía y salía de casa con Box detrás.

Ahora hasta mi perro me dejaba. Ya lo castigaria por eso más tarde ahora quería tomar un baño caliente. Me levanté de mi cómodo sillón para ir a nuestra habitación a quitarme mi ropa y entrar a la ducha.

....

"Uhg" escuchó detrás de mis espaldas.

Volteo para encontrar a Derek con disgusto al verme comer un pepinillo.

"Si tanto te disgusta no se que haces parado ahí" dije volviendo a comer otro pepinillo.

La verdad es que es mi primera vez comiendo pepinillos y estaban muy sabrosos. No sabía por qué le hacían el fuchi algunos.

"En serio Stiles, ¿Desde cuándo te gustan?" pregunto otra vez.

"Desde hoy" conteste con un pepinillo en mi boca.

El lado derecho se hundió, Derek se encontraba sentado con una pierna cruzada viendome fijamente.

"¿Estas empezando con antojos?" pregunto con una sonrisa de lado.

"No lo sé pero si es así" tome otro pepinillo apuntandole "Prepárate para complacerme y donde no me cumplas algún antojo tendrás tú la culpa de que nuestro hijo salga con cara de ese antojo.

Su sonrisa se extendió más "Te complacere en todo lo que pidas" se acercó y antes de que me metiera mi antojo beso mis labios alejándose dos segundos después "Siempre y cuando no sean pepinillos" saco su lengua con asco.

Solté una gran carcajada al ver su rostro.

Ay, me iba a divertir mucho. Empezaba a gustarme estar embarazado.

....

Dos días y estábamos en casa de nuestro amigo Liam que cargaba de un pequeño de poco cabello y piel clara como la suya. Era tan pero tan pequeño que me daba ternura, sus pequeñas manos, sus piesitos. ¡Ya quería a mi bebé!

"¿Cómo les va con los pequeños?" pregunto Derek sentado a mi lado.

Scott que cargaba de la pequeña Linci sonrió con unas pequeñas ojeras bajo sus ojos.

"Las noches son las que son un poco difíciles pero con sólo verlos..." miro a la bebé que le miraba atenta "Mis desvelos no son nada a comparación de la felicidad que me dan"

Liam que dormía de Silver sonrió dando un asentimiento.

"Y tú Lim, ¿Cómo estas?" pregunté.

"Estoy mejor que hace dos semanas que me moría del dolor" rio un poco "Ahora estoy mucho mejor"

"Tu amigo" voltee a Scott "¿Cómo estas?"

Apreté mis labios en una sonrisa.

Las miradas de Liam como de Derek fueron a mi.

"Bien Scott, sólo un poco cansado pero aquí mi Derek..." puse mi mano sobre su pierna "Se encarga de complacerme, ¿Verdad?"

Derek rodo los ojos con una sonrisa "¿Tengo que no?"

Ante su respuesta los dos rieron mientras yo le miraba. ¿Con que esa era su respuesta ehh?

"Ahora mismo quiero unos pepinillos" dije viendo como su expresión cambiaba.

"Stiles por favor" suplico.

¿Y como no cuando tenía que ir caminando hasta la tienda que quedaba a quince cuadras? Aunque no sabía por qué se quejaba cuando salía a correr en la Universidad.

"Los quiero ya Derek" apunte golpeado mis dedos en su pierna.

Soltando un resoplido se levantó caminando a la salida mientras nuestros amigos reían mucho más.

Vaya que el pequeño Silver tenía el sueño pesado.

"No te vayas sobre Derek amigo" dijo riendo Scott.

"Él dijo que complaceria todos mis antojos" conteste encogiendome de  hombros.

Liam negó divertido ante mi respuesta. Definitivamente la pasaría de maravilla estos siete meses restantes. Mis cambios eran mi cosa favorita.

26/09/21

Una vida juntos II (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora