«lost»

«ángel»

Una de las pocas cosas de las que no puedo quejarme sobre mi vida, es mi mejor amiga. Si, ya sé que todos pensaron lo cursi que es esto, pues lo será. Pero ella siempre ha sido y sé que será una de las mejores personas que ha llegado a mi vida.
Siempre que las personas quieren definir una relación de amistad muy fuerte nos usan como ejemplo, siento satisfacción por eso, si les soy honesta.
Ella conoce todo sobre mi, ni mi propia madre lo sabe todo; ella sí, sabe los detalles sobre mi vida, yo se todo sobre ella; con una simple mirada sabemos que algo no anda del todo bien. Ella es la típica chica lista, yo no tanto, ella me ayuda a estudiar, yo la ayudo a ser creativa, ella da ideas, yo les doy vida; nos complementamos.
Para mi, ella es como un ángel; está ahí siempre para cuando más la necesito, me ha ayudado a salir de ese pozo de tristeza o aunque sea a no caer en el fondo, sus alas me protegen del golpe, y viceversa.
Sin ella, créanme que existirían muchísimos más blogs escritos por mi y mucho odio (más del habitual), ella me calma, me hace reír, me ayuda y me salva