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Cómo pudo se levantó a duras penas y comenzó a caminar de manera lenta, observando cada rincón de su castillo que al estar vacío era más que abrumante.

Paseando por los pasillos de aquel lugar observó con cierta curiosidad las gotas púrpuras que resbalanban de su pecho remplazando lo que alguna vez fue sangre, alzó los hombros dándole poca importancia y siguió caminando hasta llegar a su habitación.

Una vez llegó a ahí, busco y tomó todo lo que le había llegado a pertenecer a los chicos que alguna vez ahí habían habitado.

Se acercó a la chimenea que adornaba su habitación y se sentó frente a ella, dejó las cosas en el suelo y las observó, tomó aquella bonita pulsera que le había pertenecido a Blueberry, un chico bastante lindo que había llegado ahí y la tiro al fuego

Después observó aquel gorro que otro chico ahí había llevado, Nightmare, bastante lindo.

Y así con todos sus objetos, los tiro al fuego y pronto se había provocado un gran incendio del cual corrió con todas sus fuerzas mientras mantenía una sonrisa en el rostro

La locura de la Duquesa de VenomaniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora