❪ Feromonas ❫

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Cuando Jeno le pasó el balón a Donghyuck con la intención de que (este segundo al estar más cerca de la portería contraria) anotará, la fuerza con la que pateó fue sumamente débil, por lo que un niño del equipo contrario logró robarles el balón.

Fue así como el equipo de Jeno perdió el juego, pero no fue eso exactamente lo que provocó que todos sus compañeros comenzaran a quejarse con él, sino porque se había hecho una apuesta; ahora Jeno y sus compañeros tendrían que invitarles dulces a los del otro equipo durante toda la semana.

El pobre reprendido decidió ignorar las alegatas del montón de niños de ambos equipos y se fue con algo de dificultad hasta las gradas para tomar asiento y descansar. Estaba raramente exhausto, y aquello le extrañó ya que su cuerpo nunca se había sentido tan cansado después de un juego y menos durante uno.

Renjun, quien lo miró alejarse desde la cancha, optó por igualmente dejar la riña e ir a ver a su mejor amigo.

-Jeno, ¿sucede algo?, te noto raro desde hace rato.-

-Es que... No me siento bien, Injunie... Desde la mañana me duele mucho la cabeza y mi cuerpo no responde como normalmente.- Sus ojitos se aguadaron, pues la sensación de estar mal le asustaba y ese sentimiento le causaba ganas de llorar.

Renjun lo examinó con la mirada. -Debes estar enfermando o algo así. Será mejor ir a la enfermería.- Le extendió la mano. -Vamos, yo te acompaño.- La palabra "enfermería" le causó terror a Jeno pero finalmente accedió a levantarse ante la mirada insistente del chino así que tomó su mano para apoyarse y a paso lento comenzaron a retirarse.

De pronto llegó a su lado otro niño de expresión curiosa: Donghyuck.

-Hey Jeno, ¿qué te pasó allá? Es la primera vez que perdemos jugando contigo. Ahora por tu culpa tendremos que comprarles golosinas al jirafon de Soobin y sus amigos.- Recibió una mala mirada de Renjun, quien apenas podía con Jeno (pues este se apoyaba con el brazo rodeándole el cuello).

-Jeno no se ha sentido bien. Así que mejor cállate y ayúdanos a llegar a la enfermería.- Donghyuck asintió avergonzado e igualmente sujetó al niño más alto.

Al dejar a Jeno en la enfermería el par de niños escucharon un poco de la conversación entre el nombrado y el doctor, sin olvidar mencionar que salieron huyendo del lugar con sus narices tapadas mientras reían por las especulaciones que iban formando en el trayecto a su salón.

-¡Ya llegaron!- Anunció Yangyang, señalando desde su lugar a Renjun y Donghyuck que cruzaban la puerta. Jaemin que conversaba con él se levantó de su lugar a toda prisa siendo seguido por Yangyang y Shotaro.

-¡¿Dónde está Jeno?!- Indagó con tono furioso. -Tengo que golpearlo por hacerme perder dinero.-

Donghyuck rió, al contrario de Renjun quien sólo rodó los ojos.

-Que ya tienes alfa, Nana.- Dijo Donghyuck burlón, Jaemin ladeó la cabeza sin comprender.

-Jeno no jugó bien porque se sentía mal. Lo llevamos a la enfermería y supimos que se encuentra así porque ya se está presentando.- Explicó Renjun con una sonrisa, pues la expresión de Jaemin estaba cambiando drásticamente de ser confundida a una de terror.

-Prepárate para esto Jaemin...- Hizo una pequeña pausa para dejar escapar una risotada. -Cuando ya nos íbamos, ¡el cuarto de enfermería se llenó de un aroma a café! ¡Aigo!, sus feromonas estaban increíblemente alborotadas que incluso mi ropa ahora huele como Jeno, a nuez y a la vez a macho alfa.- Y Donghyuck, ahora junto a Renjun comenzaron a reír a escandalosas carcajadas ya que Jaemin era una viva representación de la pintura "El grito" después de haber escuchado todo lo sucedido.

No es que Jaemin odiara a Jeno, pues en realidad son amigos (e incluso se gustaban mutuamente) pero la actitud de éste hacia su persona a veces le irritaba bastante.

Todos sabían que a Jeno le gustaba en demasía el pequeño omega de largas pestañas y delicioso aroma a fresas y cerezas por lo que solía ser muy imprudente al demostrarlo y esto es lo que desubicaba al niño más joven.

Después de escuchar que Jeno se estaba presentando como alfa, Jaemin sintió una inmensa sensación de inquietud ya que este hecho significaba que ahora el aludido estaría detrás de él con más insistencia.

Escuchando las implacables risas de los cuatro niños a su alrededor se tiró a la silla más cercana de un sentón, rendido, comenzando a prepararse mentalmente para lo que sucedería con la presencia de un tonto alfa de nombre Jeno.

Tonto Alfa Jeno「NoMin」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora