Suave - Kagehina

Suave aroma

El viento soplaba de forma agradable, jugaba con su cabello y le daba paz, le permitía olvidarse por un pequeño momento en la situación en la que se encontraban.

Hinata acababa de vomitar en un árbol cerca del camino, mientras los demás habían decidió bajar a estirar las piernas un momento.

Se dirigían a un pequeño premio por sus afortunados entrenamientos, un poco de relajación antes de que las batallas decisivas comenzaran. Unas pequeñas pero bonitas cabañas hacia las montañas, como si fueran de película, o al menos así se veían en los panfletos.

-Me da gusto que cada vez puedas aguantar más los viajes- sonreía Tanaka palmeándole la espalda recordando aquel trágico incidente donde sus pantalones habían sido el destino del malestar de Hinata.

-Hinata- se acercaba Yachi -¿Te sientes mejor? Te traje agua- le acercó una botella para que pudiera rehidratarse.

-Gracias- contestó el pelinaranja con un notable malestar

-Shimizu- Suga llamó la atención de la Manager del equipo -¿Cuánto tiempo queda de viaje?-

-Con recurrentes paradas, llegaremos en 3 horas aporoximadamente- respondió haciendo referencia a las múltiples veces que habían tenido que detenerse para que el de primer grado pudiera llegar por lo menos a un árbol.

-Lo siento- respondió el pelinaranja apenado.

-Esta bien, sirve para estirar las piernas- le sonrió dulcemente la manager.

-Además hay cosas que solo vemos cuando tomamos una desviación- comentó inesperadamente Kageyama mirando al cielo asombrando inmediatamente a todos los presentes -al menos eso dijo Saekonee-san-

Tanaka y Nishinoya comenzaron a reír ruidosamente, siendo los más notables.

-Por un momento pensé que estabas madurando Kageyama- bromeó Ryuu

-Aunque eso sí suena como Saekonee-san- secundaba Noya.

-Chicos vámonos ya- gritaba el entrenador haciendo señas a todos de que volvieran al autobús.

✨

El viaje tuvo un par de paradas más antes de llegar al destino, por fortuna Hinata no fue el culpable de ninguna.

Finalmente llegaron, a decir verdad lucían mucho más simples que las del folleto, pero no dejaban de verse bien, era un conjunto de varias cabañas pequeñas que formaban en el centro un área recreativa amplia, que incluía un comedor para todos, una cocina y al otro lado las regaderas y el ofuro.

Las cabañas eran perfectas para dos personas, supuestamente algunas estaban equipadas con literas o camas gemelas, pero otras suponían una cercanía más íntima.

-Las parejas serán asignadas para conveniencia de todos- inició el profesor Takeda dándole pie a Shimizu que los nombrara.

A decir verdad no le sorprendía terminar con Kageyama, al final de cuentas eran cuatro de primero y no es como si prefiriera estar con Tsukishima y sabía que aunque fueran acomodados de otra forma, este terminaría durmiendo con Yamaguchi, parecía ante los ojos de Hinata, la única persona a la que de verdad toleraba.

-Dejaré aquí la lista de las parejas y el número de la cabaña que les toca- finalizó Kiyoko pegando una hoja con el orden en una especie de pizarrón que tenía el área común para dar anuncios.