Erotismo Oculto

La chica nueva,Lucía

Habían pasado dos meses desde el accidente, mi prima se había marchado a casa de su padre al otro día sin decirme nada. Aun no sabía quién era aquella chica que me rescató del fondo del rio.
En ocasiones, en mis sueños, aparecía una silueta de una chica poco mayor que yo, pelo largo, tan largo que rosaba con sus talones, un cuerpo poco voluptuoso, pero firme y por último, un porte sombrío y oscuro pero a grandes esfuerzos no conseguía saber quién era.

Era de mañana, como de costumbre debía ir a la escuela, llaman a la puerta y mi abuela entra como de costumbre con mi desayuno

–De nuevo pesadillas?- dijo mientras se sentaba a mi lado, poniendo el desayuno en la mesita de al lado de mi cama

-si- dije con desanimo mientras me frotaba los ojos para después tomar mi desayuno.

Poco dispuesto a emprender mi viaje a la escuela, me puse el uniforme y salí rumbo a la escuela.

Transcurrió el día entre profesores y clases nuevas, hablando de cosas nuevas, una chica ingresó a nuestra clase

–Qué extraño, una alumna nueva a estas alturas del curso?- le dije a Ernesto, mi único amigo en toda la clase.

La chica era callada, un poco bajita, pelo negro con unas mechas en rojo que caían por sus mejillas y sus labios rojos despertaban deseos de besarlos.

–Axel, puedes mostrarle la escuela a la nueva estudiante?- dijo el profesor refiriéndose a mí.

Me levanto de mi silla y me sitúo frente a la chica. Ella, que en el poco tiempo que estuvo en el salón no había dicho palabra alguna y tan siquiera había levantado la mirada

–Así que tú eres mi guía turístico- dijo con sarcasmo mientras me miró a los ojos,

Con el mismo sarcasmo le respondí –empezamos el tour?-
Al pasar por las instalaciones de la escuela y notar que ella estaba más interesada en su móvil que en las explicaciones que le daba, le tomo les brazo –sígueme- un poco desconcertada asiente con la cabeza y me sigue. Llegamos a la biblioteca
–está cerrada, que haremos?- pregunta ella

Del bolsillo del pantalón saco un pequeño manojo de llaves, saco una pequeña y dorada llave con la letra ¨B¨ grabada en ella

–Fácil, entramos- le sonrió. Ambos entramos y encendí las luces

–Siéntate en donde quieras- dije amablemente.

Asombrada inspecciona a su alrededor –que es este lugar?-pregunta sin dejar de ver los libros que están en unas polvorientas estanterías

Me acerco a ella ofreciéndole una botella de agua –es la vieja biblioteca, está abandonada y como mi padre es amigo del director de la escuela me dieron la llave del local, como vi que mi charla te aburría pensé que esto te interesaría más-
me siento frente a ella, la miro más atentamente y ella se da cuenta, trato de disimular un poco pero fue en vano

–Me llamo Lucía, pero algunos me dicen bicho raro-se pega al espaldar de la silla.

–Me llamo Axel, pero ya lo sabías- dije entre pequeñas risas de nerviosismo.

-Cuanto tiempo tenemos hasta que tengamos que regresar a las aburridas clases?- habla Lucía

-Imagino que unos 20 minutos- respondí amablemente mientras que por el cuello de su uniforme se asomaba un extraño pero curioso tatuaje

-Y traes a todos los estudiantes nuevos aquí o solo a las chicas?- dice Luía mientras hacía un extraño gesto con su ceja

-De hecho eres la primera en venir aquí- dije riendo un poco- que significa tu tatuaje-señalo a su cuello

La campana suena haciendo que ambos nos levantásemos de nuestros asientos –Ya es hora de regresar- digo mientras me dirijo a la puerta abriéndola para que Lucía, ella sin decir nada sale del local y desaparece a la par que yo cierro el candado de la puerta.

Se había acabado el día en la escuela y yo un poco cansado regreso a mi casa mientras recuerdo a la chica nueva, Lucía.

Espero que os esté gustando la historia, próximamente publicaré otro libro, dejen sus comentarios para saber si les gusta. Saludos