El Rey de los Mortales

Capítulo 1 La reliquia voluntariosa

Todo comenzó durante una crepuscular mañana de diciembre, yo estabarepasando para un complicado examen el cual anduve preparando desde hacía yavarias semanas, cuando de repente un sonido proveniente de la planta inferiorlogró captar al instante mi atención. Ese fue el motivo por el cual decidídescender a dicha planta a una velocidad desmesurada, el causante de ese ruidono era más que el bicolorido minino que vivía con nosotros en esa misma casa. Estemismo tiró una estantería y yo la recoloqué tal y como debía estar. Toda miatención fue hacia un resplandeciente objeto el cual estaba situado en esemismo mueble. Era un precioso collar el cual parecía haberse fabricado hacía yaunos cuantos siglos atrás, pero yo no era nadie para afirmarlo así que decidíignorar aquel detalle que me parecía mísero e insignificante. Yo decidí colocarese objeto en mi frágil cuello, un rayo de luz salió instantáneamente delcolgante, ese mismo parecía estar buscando de forma urgente una salida. Finalmente,la encontró, unas milésimas de segundo después el rayo se fue al crepuscularcielo de invierno que yo mismo podía observar desde la ventana del cuarto. Endicho momento comencé a notar un comportamiento misterioso proveniente delbicolorido minino.

Esa misma tarde había quedado con unos amigos para ir a ver el nuevo estreno deuna película de superhéroes que anhelábamos con ansias verla esa misma tarde.

Yo fui el primero en llegar al recinto, habíamos quedado a las seis y media y eran ya las seis y cuarto. Me fui a la fuente en la cual habíamos quedado, yo había traído las provisiones necesarias como para no aburrirme durante aquellos quince minutos que podrían ser muy longevos y aburridos, me distraje mirando las noticias de última hora. Esta misma hablaba de un delincuente muy peligroso que rondaba por la isla en la cual vivíamos. Yo me fijé en una silueta que me estaba mirando y acercándose de manera cautelosa hacia mí persona. Ese hombre no parecía venir con buenas intenciones, parecía que quería alguna cosa que solo tenía yo.

–Eso es lo que estaba buscando – me dijo el misterioso hombre

– ¿Hablas de este collar? – le respondí

– Dámelo y no te pasará nada – me amenazó

– No – le contesté

Entonces mis puños se recubrieron de un color oscuro y le aseste un puñetazo, no podía creer lo que estaba pasando.

– Vaya, no eres una persona para nada normal, la reliquia te ha debido escoger a ti – dijo mientras reía desmesuradamente y esquivaba mi golpe

Ese hombre misterioso tenía unos reflejos increíbles, momentos antes de que yo atacara él ya sabía el lugar en el cual le iba a asestar aquel golpe.

Ese hombre sin sentido alguno comenzó a contarme cosas, yo pensaba que lo trataba de decir con la intención de confundirme, pero ahora pienso que lo que me dijo ese día es cierto, me dijo que conocía tres tipos de voluntad.

Voy a proceder a replicaros lo que aquel sujeto me explicó.

La primera es la voluntad de revestimiento con la cual puedes cubrir un punto de tu cuerpo con tu propia voluntad, es decir, cubrir tu piel.

La segunda voluntad observadora con la cual puedes predecir movimientos que sucederán en el ambiente.

La tercera es la voluntad heredada con la cual puedes anteponer tu voluntad frente a la de otras personas.

El hombre misterioso era el criminal conocido como ''el observador'', debido a su capacidad de prever los movimientos de la gente, su recompensa era de nada más y nada menos que de cinco millones de euros.

Procedí a utilizar una de mis artimañas, una de mis técnicas de batalla, no la usaba desde que gane la carrera de velocidad gracias a esta misma técnica, esta misma recibía el nombre de aceleración de corazón. Con la cual mi cuerpo conseguía bombear la sangre más rápido de lo normal a cambió de utilizar más nutrientes y energía, mi corazón no era normal. Si una persona llegase a ese punto moriría debido a que su corazón no podría soportarlo.

– ¿Entonces sigues pensando que eres más fuerte? – dije mientras utilizaba esta técnica y le atacaba con la voluntad de revestimiento la cual yo había heredado del colgante misterioso.

– Yo ya estaba agotado cuando alguien le asestó una patada al misterioso hombre, eran los hermanos que se especializaban en el arte marcial de las patadas, Taekwondo.

El hombre misterioso se metió entre el gentío, yo decidí perseguirlo con las pocas energías que me quedaban, con la ayuda de los hermanos especialistas en Taekwondo no sería muy complicado acabar con ese hombre.

Llegamos a lo que parecía ser un callejón sin salida y el hombre misterioso se metió en lo que parecía una puerta solo accesible para el personal autorizado, así pues era un almacén el cual él utilizaba como base, de allí salió un musculoso hombre, él contaba con una recompensa de 10 millones de euros.

Entonces saqué de mi bolsillo una piedra morada que me dio un viejo amigo para este tipo de situaciones y de ella salió un fornido guerrero cubierto con una vestimenta negra similar a la que utilizan los ninjas, este mismo poseía una espada con una amenazante hoja morada. Él se hacía llamar Guerrero Sombra, este se dispuso a pelear con el musculoso hombre de los diez millones de euros.

Entonces procedí a continuar hasta la siguiente habitación estaban los dos hermanos tirados en el suelo, derrotados.

Rápidamente utilicé mi técnica de aceleración sanguínea más fuerte que tenía y el ataque con la voluntad de revestimiento. El hombre trató de defenderse pero no pudo ser capaz y con ese mismo ataque fui capaz de derrotarle sin ninguna dificultad añadida. Guerrero Sombra ya había logrado derrotar al hombre musculoso.

Yo y los dos hermanos ya agotados pensábamos que no queríamos saber ya nada más sobre el tema, así que decidimos regresar a la fuente en la cual estaban todos esperándonos impacientemente

La película fue muy interesante, pero lo que más me molestó ese día fue que le contamos la historia a nuestros amigos y no nos creyeron.

Esa misma noche aparecieron en mis bolsillos cinco millones de euros, yo rápidamente pensé que había sido el misterioso guerrero de las sombras.

Ese día fue el comienzo de mi gran imperio, el imperio del rey de los mortales. Había conseguido desarrollar una nueva clase de habilidad.