Capítulo único

753 74 92
                                    

Los rayos del sol comenzaron a impactar sobre el rostro de la chica de forma directa. Aquella molestia la llevó a abrir lentamente los ojos mientras se estiraba con suavidad. Miró a su derecha y encontró lo que encontraba todas las mañanas tras una guardia: que despertaba sola. Así eran las cosas con Zoro, pasaban las noches de guardia juntos y después nunca estaba junto a ella a la mañana siguiente. A pesar de que aquella indiferencia afectiva por parte del espadachín le dolía, sabía que no podía hacer nada para cambiarlo. Zoro le había dejado bien claro cuáles eran sus prioridades y _____ no se encontraba entre ellas. Llevaba mucho tiempo enamorada del vicecapitán, pero no veía necesidad de declararse. En primer lugar, porque eso el hombre de cabellos verdes ya debía saberlo, y en segundo lugar, porque sabía que eso no iba a cambiar la situación en la que se encontraban. Roronoa se divertía junto a ella y ella intentaba aprovechar al máximo los momentos junto a él, pues sabía que en algún momento tendría que intentar olvidarle, pero siempre se prometía que sería al día siguiente, y luego al otro, y al otro...

— ¡_____-swan! ¡El desayuno está listo! — escuchó gritar a Sanji desde la cocina.

Se levantó deprisa para bajar del Nido lo más rápido posible. Agarró las cuerdas para bajar, con tan mala suerte que se mareó y perdió el equilibrio, cayendo prácticamente al vacío en dirección al suelo de la cubierta. Nami gritó horrorizada al verla caer, y si no fuese por el Haki de observación de Luffy, la chica se habría dado un buen golpe contra el suelo. El capitán evitó que aquello ocurriese llegando justo a tiempo para sostenerla entre sus brazos.

— ¡_____! —gritó Nami acercándose, al igual que el resto. Luffy aún sostenía a la joven, mientras ésta parpadeaba incrédula ante lo que acababa de ocurrir.

— ¿Estás bien?

La pregunta de su capitán la hizo volver a la realidad, asintiendo un par de veces como respuesta. El pelinegro la bajó de sus brazos, pero siguió sosteniéndola de la cintura, ya que la notaba débil.

— Solo ha sido un pequeño despiste, —comentó al ver al renito apurado acercándose a ella— no es nada.

Entre las miradas de sus nakamas preocupados destacaba la del peliverde, que observaba confuso a la joven. ¿Un despiste? ¿Un despiste la chica que cuando la conocieron estaba casi muriéndose y aun así los recibió subida a un árbol? Su capacidad física y sus reflejos siempre lo habían impresionado, así que la había observado mucho y sabía perfectamente que un despiste no hubiese logrado que la joven cayese en picado de tal forma.

Mientras la joven se dedicaba a quitarle hierro al asunto mientras desayunaban, Chopper insistía en hacerle un reconocimiento, pero ella se negaba.

— Hazle el reconocimiento y así te quedas más tranquilo. —intervino el peliverde dándole la razón al doctor.

— ¡Tiene razón! ¡Así nos quedamos todos más tranquilos! —apoyó Usopp a su amigo.

— ¡Claro! — insistió Luffy preocupado.

La mencionada se giró a observar enfadada a Zoro, quien le sonrió burlonamente. Él sabía que odiaba los chequeos médicos porque le recordaban a su antigua enfermedad, pero lo cierto es que él también se había preocupado.

Ahora la joven se encontraba con Chopper en la enfermería. El renito parecía confuso observando todo el historial de la joven. Decidió hacer una pregunta para asegurarse, aunque era una estupidez, los análisis y las pruebas confirmaban sus sospechas iniciales. Aun así, formuló la pregunta.

— ¿Cuánto tuviste la última menstruación?

— Hace dos meses. —respondió encogiéndose de hombros llevándose a la boca el zumo que Sanji le había preparado con el fin de subir el azúcar de su cuerpo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 11, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Fake disease (One shot Zoro x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora