Capítulo XIII: Familia

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Rompió, un trueno, la paz de la mañana en Hogwarts.

Alterado me asomé a la ventana y vi una tormenta de nieve bastante fuerte.

Miré mi reloj y ponían las nueve en punto, decidí cambiarme y leer un libro.

Después de vestirme encendí la hoguera ya que empezaba a hacer frío.

Cogí un libro de una escritora española, Laura Gallego, ella escribió una de mis sagas de libros favorita, las crónicas de la torre.

Y cogí a Coco que estaba temblando del frío, él solito se puso en mi cuello.

Cuando empezé el segundo libro, al fin se despertó Cedric:

-Buenos días pequeño- vino hacia a mí y me dió un beso en la frente.

-Buenos días amor- dije sin apartar la vista del libro.

-Me voy a duchar- dijo mientras cogía a su hurón y me lo dejaba a mi.

-Vale, ves con cuidado- le dije mientras acariciaba a los hurones, Coco y Pipa.

Oí como el grifo de la ducha se encendió.

Derrepente escuché unos colpecitos en la ventana.

Me asomé y era Hedwig, la lechuza de Harry y me fijé que tenía una carta en el pico.

Abrí la ventana y entró.

Se sacudió para quitarse la nieve que tenía.

Le acaricie y me dio la carta que ponía mi nombre.

La abrí y ponía lo siguiente:

~Querido hermano, como sabes hoy nos vamos de vacaciones de navidad y me preguntaba si Cedric venía con nosotros a casa de los tíos.

Un beso Harry~.

Me senté en el escritorio y cogí una hoja que tenía por ahí y escribí lo siguiente:

~Querido Harry, obviamente Cedric viene con nosotros, pero solo estará el día de nochebuena, el de navidad y el día de después.

Jack~.

Cuando estaba cerrando la carta en el sobre, Cedric salió del cuarto de baño con solo una toalla en su cintura.

-Puedes parar, eso se llama tentación- le dije mientras me tapaba los ojos.

-No es una tentación, esto está abierto para cuando tú quieras- me dijo en el oído.

-Oy por favor- le dije poniendo los ojos en blanco.

-Vaya, parece que tenemos invitados- dijo mientras acariciaba a Hedwig.

-Sí- dije mientras me reía.

Cogí la carta y se la dí.

-Bueno pequeñín te veo después- le dije mientras le acariciaba.

Él alzó el vuelo y se fué a la torre de los Griffindor.

Minutos después cogí mi baúl y empecé a guardar mi ropa.

Me dejé, el uniforme con la túnica y los libros ya que dentro de dos semanas volvemos así que no vale la pena llevárselos.

Cuando ya teníamos los baúles llenos Cedric y yo empezamos a cambiarnos.

Yo me puse una camisa ancha de lana y unos vaqueros y Cedric se puso algo más deportivo, sudadera amarilla y pantalones de chándal.

Cogimos a nuestros hurones y la llave para cerrar el dormitorio.

Cerramos la puerta con llave y nos fuimos al gran comedor.

Mi Hufflepuff | Temporada 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora