El camino de la Felicidad

Capitulo 15: La Advertencia de Amaterasu

Habían pasado cinco meses desde que Zero había llegado a la asociacion de Cazadores. Cinco meses en los que muchos de sus amigos contrajeron matrimonio. Hana se casó (de nuevo) con Renkotsu. Ruka se casó con Irazue, Kain con Jakotsu, Shikki estaba comprometido con Inuyasha, Bankotsu había comenzado a cortegar a Cross mientras que Bakuya iniziaba una extraña amistad con Yagari. Naraku seguía siendo un pervertido con Kaname, pero Yuuki se encargaba de mantenerlo a raya; Kaito había sorprendido a todos cuando anunció su relación con Rima, lo que acarreó que Shikki y la familia de Rima se pusieran celosos. Muchas cosas habían cambiado, como el hecho de que las familias nobles (Souen, Aido, Akatsuki, Kuran, Shoto, Ichijo, aunque solo fuera Takuma y  Toya) estaban empezando una alianza con la asociación de cazadores, cosa que molestó al consejo de Vampiros, al ver que estaban perdiendo gran parte de apoyo politico de parte de las grandes familias nobles. 

Actualmente Zero se encontraba revisando un documento mientras acariciaba su vientre abultado de 5 meses. Sabía que Sesshomaru se encontraba entusiasmado con el bebe, tanto así que se puso paranoico al pensar que algo podría pasarles cuando él no estuviera. Rodó los ojos ante el dramatismo de su esposo; fue interrumpida por un fuerte golpe en la puerta, al levantar la vista, vió a Yuuki jadeando mientras miraba a su alrededor como vigilando que nadie la seguía. Yuuki después de unos cinco minutos se tranquilizó y fue hacia el armario especial de Cross.....en realidad solo era un armario donde guardaba vodka y vinos. Yuuki agarró la botella de vodka y la puso en la mesa, para después sentarse y beber el contenido de un trago. Zero solo la vió y siguió leyendo el documento para que minutos después lo firmara:

Yuuki: Sayumi se me declaró *bebe de la botella*

Zero dejó de escirbir para mirar a quien había sido su hermana durante su niñez y adolescencia; sabía que Sayumi estaba encaprichada o enamorada de una sangre pura.........nunca se imaginó que fuera de Yuuki; veía a Yuuki quejarse sobre lo malvada y pervertida que era la noble y que preferiría a Hana. Zero siguió escuchando mientras tomaba su taza de té, porque Sesshomaru le había prohibido tomar café, cosa que hizo que Zero se molestara y le hiciera la ley del hielo, pero después de ver los ojos de cachorro de Sesshomaru le devolvió la palabra. De repente por la puerta apareció Takuma todo desarreglado, el cabello despeinado, tenía su camisa desabotonada y en su cuello se podía apreciar un par de chupones. Zero y Yuuki abrieron los ojos por la vista y más al ver las lagrimas de Takuma, asomarse por sus ojos para después lanzarse a los brazos de Cross, que venía bajando después de su siesta. Cross no sabía que hacer, simplemente le dió unos golpecitos suaves en su cabeza, mientras veía a su hija Zero y a Yuuki:

Cross: Que paso? 

Takuma: *llora* ¡Kyomi-san, eso fue lo que pasó¡ *llora más fuerte*

Zero: Kyomi? Que hizo, Takuma?

Takuma: *ve a Zero* verás.....

+Hace unos minutos+

Takuma se encontraba caminando tranquilamente mientras leía un libro. De pronto, oyó un grito furioso y vió a Kaname, su amigo lanzar una mesa y una silla a Naraku. Solo rió nerviosamente, mientras veía a la pareja irse con una sonrisa. Siguió leyendo cuando inmediatamente lo empujaron y sintió como su espalda chocaba contra un arbol. Alzó su vista solo para ver la mirada llena de lujuria de Aido Kyomi. Esta (Kyomi) se relamió los labios al ver el rostro sonrojado del vampiro noble. Takuma solo atinó a quedarse quieto por miedo a lo que pudiese hacer la joven vampiresa que era unos años mayor que él (entiendase unos 15 años). Kyomi desabrochó la camisa del noble, solo los tres botones, para después pasar a lamer su cuello y clavar sus colmillos. Takuma gimió por el dolor repentino, sus mejillas se pusieron rojas, inultimente intentaba apartar a la joven, pero eso hizo que Kyomi sonriera para después besar el cuello de ese vampirillo que lo traía loca. Después dejó unos chupones en su cuello, volvió a morderle. Kyomi adoraba la sangre de Takuma, era dulce pero no empalagosa, amarga pero no al extremo; más bien era semi-dulce: