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Se encontraba inmerso en las melodías que se reproducían en su cabeza, aún que sentía que ninguna era lo suficientemente buena como para hacerle justicia a la letra que había escrito

Pero no perdería las esperanzas, tal ves con una guitarra las ideas fluyan y logré completar la canción

Continúo pensando en eso y creando musica cuando de pronto se exaltó debido a una mano que se colocó en su hombro

¡Jin! ¡casi me matas de un susto!— reclamó el príncipe— esto se te está volviendo una costumbre

—El muchacho río —vamos sólo toqué tu hombro, no es culpa mía que alguien esté tan metido en sus pensamientos, por cierto la canción es buena, ¿tú la escribiste?

Tal vez —contestó seco— no es de tu incumbencia

¡Oye! soy tu mejor amigo ¡cuéntame!—dijo Jin fingiendo estar ofendido colocando una mano en el pecho como si su corazón le doliera inmensamente debido a la crueldad del príncipe —

Bien... yo la escribí pero no está terminada, le falta una melodía, además no creo que sea tan buena así que no hay que hablar de eso— realmente a Tae le avergonzaba un poco que su amigo conociera todos sus sentimientos más íntimos por medio de esa canción, por lo que prefería cambiar de tema rápidamente—

¡Pero qué dices! acabo de llegar así que sólo escuché un pedazo pero es obvio que lo escribiste de corazón y también es obvio para quién va dirigida—Jin puso su mano en el hombro del joven y comenzó a darle palmaditas en modo de apoyo—

Supongo que es un poco obvio ¿cierto? pero da igual, de todas formas no puede escucharla— la mirada del príncipe era triste, vacía, como si su vida hubiera dejado de tener sentido—

No digas eso, él se va a poner bien, va a despertar y se la vas a poder cantar, más bien concéntrate en eso, tienes que terminar esa canción para cuando despierte—

Supongo que tienes razón, por cierto ¿no has visto a la doctora?—dijo como segundo intento para cambiar de tema lo antes posible—

Cosa que logró.

Sí como tres veces en el día de hoy, se la ha pasado corriendo de aquí para allá con papeles en las manos—respondió Jin—

Espero que esa no sea una mala señal— el príncipe volvió a centrar su atención en la puerta qué los dividía de Jungkook—

De pronto la señorita Lee pasó frente a ellos

Ah ¡doctora Lee! — llamo Tae—

sin embargo no notó su presencia y entró directamente a la enfermería cerrando la puerta tras ella

Vaya, supongo que no pudo escucharme— dijo algo desanimado el príncipe, acompañado de un suspiro—

Seguramente no, dudo mucho que se atrevería a ignorarte siendo un príncipe,  y sabiendo los castigos que puede recibir por eso — respondió Jin—

Sí es verdad, espero que salga pronto necesito preguntarle cómo salieron los resultados de Jungkook, me dijo que solamente debíamos esperar hasta ahora— en su voz se podía notar una mezcla entre miedo y un toque de esperanza—

🔘 hermosa alucinación 🔘 Historia KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora