¡No Dejan Dormir!『sᴏᴜᴇɪ᥊ʀɪᴍᴜʀᴜ』

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Hoy había sido un día pesado para el Shadow Squad, ¿Porque?

Sencillamente...

-Necesitan salir no solo por misiones, así que pensé que sería genial que fueran mis guardaespaldas en mi visita a Armed Nation of Dwargon y pudieran divertirse. -La aurora entusiasta de Rimuru-Sama casi podría haberlos dejado ciegos, los Dragonewts no pudieron evitar compartir la emoción siendo Souka un poco más discreta ante la presencia gélida de su maestro Souei.

Rimuru explico los detalles aún en su forma Slime sobre el escritorio teniendo la figura de una deprimente asistente a su lado, sus facciones arrugadas en un puchero de reproche dedicándole de vez en cuando una mirada recelosa a los espías.

Si Rimuru era conciente de las protestas silenciosas de Shion simplemente las ignoraba.

Aunque Souka tenía el presentimiento que era debido a lo ocurrido anteriormente, donde Shion termino borracha provocando que Rimuru lidiara el bochornoso momento con el Rey Gazelle.

-Seria todo un honor poder acompañarlo, Rimuru-Sama. -Respondió Souei con la voz tan monótona que le caracterizaba, la figura del Slime se estremeció pero paso desapercibido por la mayoría de los presentes.

Souei se reverenció una vez finalizo su reunión con el leve asentimiento de la baba, todos los demás imitaron su acción.

-Pueden retirarse a empacar lo necesario, mañana mismo partiremos. -Informo Rimuru; acto seguido de su figura alzó lo que aparentaba ser un pulgar arriba-. ¡Cuento con ustedes!

Souei tararea en contemplación, su atención enfocada en el Slime, mirándolo de forma intensa que era difícil para Souka-quien casualmente le observo por el rabillo del ojo-,seguir la línea de emociones ante la breve abertura que había dejado él al perder la concentración, error que enmendó casi al instante retomando aquella compostura tan profesional.

Con un sonido que podría considerarse como despedida se deslizaron fuera de la oficina silenciosamente.

Poco después se escucho los lloriqueos y súplicas de Shion por querer ir. Fue negada la petición.

Y volvemos al presente.

Decir que sería algo sencillo queda corto, pues no solo tomaron el papel de guardaespaldas si no igual de asistentes inesperadamente para todos, ya que para su desgracia todos en Armed Nation of Dwargon habían organizado un festín que el mismo Rey Gazelle aprobó.

Obviamente debían estar presentes y proteger a Rimuru ante su ingenuidad como glotonería, caía fácilmente ante los platillos que ofrecían desconocidos.

Cómo una pequeña cría, pero no podían negarle aquel capricho ante su mirada ilusionada.

Fue agotador.

Y después de horas que parecían no tener fin, llegó el tan anhelado descanso, encontrándose en los extensos pasillos del palacio del Rey Gazelle, reunidos a petición de su señor.

-Lamento todo eso. -Murmuro un avergonzado Rimuru, quien se rascaba la cabeza para amortiguar un poco la pena

Todos sonrieron y negaron.

Aunque no lo admitirían en voz alta fue realmente divertido y entretenido.

-Aun es temprano, conozco un bar donde podrían animarse -.Tarareo Rimuru dándoles una sonrisa pícara, los Dragonewts no pudieron evitar dar un leve brinco ante la sugerencia inesperada.