Segunda Oportunidad

Extra dos

Pueden decidir ignorar este capítulo y dejar el anterior como el final o simplemente dejarlo estar.

Lo tenía escrito así desde hace un tiempo y estaba por eliminarlo pero que más da, ya estaba escrito. 🤷🏽‍♀️

Las manos de Kara temblaban mientras el coche continuaba avanzando. Lena aún lado de ella tomo su mano y le dió un suave apretón.

—Tranquila cariño, todo estará bien.

—Estoy asustada. —reconocio lo evidente. Lena la miro con ternura.

—No tienes porqué, Eliza te ama y no ha dejado de pensar en ti todo este tiempo. —le consoló.

—Aun así tengo miedo, Alex me comentó que la salud de mamá comenzó a decaer desde mi "muerte". Temo que esto sea contraproducente.

—¿Y si es lo contrario? ¿Y si verte es lo que Eliza necesita?

—¿Y si no lo es?

—Eso no lo sabremos hasta estar ahí. —apreto su mano.

—Oh rao, estamos llegando… —comenzo a temblar

—Ven Katie, dale un abrazo a mamá. —llamo Lena a su hija que jugaba distraída en su tablet.

Katie dejo obediente su tablet a un lado y abrazo a su madre rubia con fuerza. —Te amo mamá

Kara la contemplo enamorada, olvidando por un momento sus preocupaciones. —Yo también te amo amorcito

Antes de que pudieran abrir la puerta del coche, está fue abierta por una afligida y llorosa Eliza que la miraba

—Por favor dime qué no estoy soñando, Lena.

La susodicha la miro comprensiva, entendía el sentimiento. Habían pasado dos semanas desde que la rubia había regresado a sus vidas y todavía habían mañanas en que le costaba creer que el que estuviera ahí fuera real. 

Lo que las llevaba a ese momento a encontrarse ahí y que hayan esperado ese tiempo, apesar de habían querido contarle a Eliza desde el primer día del regreso de su hija, habían acordado esperar unos días a qué la salud algo deteriorada de la mujer mejorará, dado que Kara tenía miedo a lo que su regreso podría provocar en esta.

—No lo estás Eliza, Kara está aquí. Tu hija, el amor de mi vida ha vuelto —conto conmovida. Era imposible no sentir ese nudo en su garganta al recordar todo lo sucedido m

—Y yo la encontré —grito Katie para hacerse escuchar entre las mayores.

Kara sonrió entre lágrimas y beso la mejilla de su hija. —Si lo hiciste bebé, me encontraste

"Y que bueno que lo hizo, estaba apunto de marcharme de la vida de ambas para siempre" pensó al recordar esos días dónde creía que Lena había seguido adelante con alguien más.

Eliza sollozó. —¿Quieres bajar del auto para que tú vieja madre pueda darte un abrazo?

Kara asintio llorosa.

Lena bajó para darle paso a la rubia para salir. Apenas puso un pie fuera del coche fue llevada a un fuerte abrazo por parte de su madre.

—Dios… estás aquí. Mi niña está aquí —lloro desconsoladamente. Tantos años de dolor, de ausencia y ese sentimiento de perdida. —No.. no puedo creerlo

Kara trago el enorme nudo en su garganta. Todavía sin poder creer la cantidad de dolor que ser una "súper heroína" había traído a su familia.

—Volvi mami, volví —la abrazo más fuerte. Cómo queriendo decir, "estoy aquí, soy real. Sienteme. Soy tu niña. Tu sol."