Peter ha muerto.
Ahora su familia debe superar esta perdida tan grande y poder salir adelante junto con su otro hijo mayor quien este está sumergido en otro mundo que son los: Recuerdos y negación por la muerte de su hermano menor. Un Tony con ataq...
Tony bebía sin parar en su sala, no le importaba donde se encontraba su esposo e hijo. Solo le importaba su whisky. Toda la casa estaba con cosas rotas.
-¡MALDICIÓN!-Grita Tony con lágrimas y tirando el vaso al suelo- Necesito dormir...-Se dirige a su habitación para levantar su mirada en el grande espejo suyo mostrando su horrible apariencia. Ojeras, mucha barba sin cortar durante semanas...-¿Qué...?-Tony entra en un ataque- No..no..¡NO! ¡NO!-Golpea el espejo rompiéndolo en pedazos- ¡AAAAAAAAAAAAHG!-Mira su mano repleta de sangre, pero luego voltea a la grande ventana donde se podía apreciar una bella vista desde la ciudad-...-Toca con su mano el vidrio manchando a este mismo con su sangre-
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Se preguntaba como pudo llegar a ese nivel, como pudo dejar que todo esto pasara, como pudo dejarlo ir tan fácil... ¿Podía haber hecho la diferencia? ¿Hubiera servido? Al menos le hubiera dado más tiempo... pero así no fue como fueron las cosas... el destino ya estaba escrito.
Esos pensamientos suyos fueron interrumpidos por una voz dulce que lo llamaba desde el fondo del cuarto, se podía apreciar en la voz aquella algo de alegría con algo de sufrimiento en ella. Esta repetía siempre la misma frase todas las noches desde que recuerda que enterró a su hijo.
"¡Papi! ¡Papi! Hay que jugar a las escondidas...tú cuentas mientras yo me escondo.."
Siempre era lo mismo, ya estaba harto de escucharlo una y otra vez sin cansancio alguno. Como si su mente le jugara una mala jugada, no podía superar esta perdida tan grande, no quería pedir ayuda a nadie, por un momento llego a pensar que podía sobresalir, pero era una falsedad que hasta el mismo no se creyó la maldita palabra. Quería dejarlo todo y dejarse caer desde lo más alto de su torre sin oportunidad de sobrevivir y no despertar y tener que aceptar que él ya no estaba su lado. No quería aceptar que su pequeño ya no estaba a su lado. Sin darse cuenta camino hasta llegar al último piso y se quedó mirando el barandal pensando si terminar todo de una vez.
-"¡Papi! ¡Papi! ¿Por qué no me buscas? ¿No te diviertes?"
De nuevo escuchaba esa voz, soltando un grito al aire intentando de que sus penas se las llevara el viento. Harto de todo camina hasta quedar en la punta del techo con la intención de saltar y no mirar atrás. Pero un grito llamo su atención. Volteando encontrando a su esposo atrás de el, estirando su brazo intentando agarrarlo, en su rostro se notaba ojeras y ya no tenía ese brillo que lo enamoro desde el inicio.
-¡No saltes Tony!-Grita Steve con la voz rota- ¡P-por favor! ¡No lo hagas!- Mira como su esposo pedía a gritos que no se quitara la vida-
-Él no volverá...-Habla el moreno- Rogers....lo escucho todas las noches pidiéndome que jugué con el...no estoy bien..-Da un paso, pero su esposo grita-
-¡BASTA! ¡Yo también estoy mal! ¡HARLEY ESTA PEOR! ¡LOS TRES SUFRIMOS! ¡¿Sabes donde esta ahora nuestro hijo!? P-por favor tony... tenemos que resolverlo los tres juntos-Le ofrece su mano, pero el moreno dudoso responde-
-Tengo miedo.-Responde Tony mirando a los ojos de su esposo dejando caer lágrimas- Me duele el pecho... siento como me estoy quemando lentamente...no me gusta este sentimiento... ayúdame por favor...
Ambos maridos se abrazaron en la azotea, ninguno se quería separar de este abrazo aunque era caliente este contacto ninguno de los dos sentía el calor. Solamente un dolor por un pequeño que ahora descansaba bajo tierra.
