El sueño

Capítulo final

Es jueves por la mañana, llevo una semana de mierda, mierda, llevo vomitando todo lo que como desde ayer, no sé si será por algún virus que tuviesen algo de lo que comí o qué.

-Nena, creo que deberías irte a casa- Dice Kate, entrando por la puerta y dejándome un pastelito de queso encima de la mesa.

Lo miro con cara de asco y lo aparto un poquito, Kate me da una mirada cansada y se come el pastelito,.

-No hace falta, estoy mejor, de hecho...-Me levanto de la mesa corriendo para ir al baño, y vomito de nuevo.

Kate se acerca a mí y me sujeta el pelo mientras las convulsiones del vomito me azotan el cuerpo.

-Vale, quizás debería ir a casa- Digo yo, levantándome del suelo del baño con ayuda de Kate.

-Por fin me escuchas- Dice ésta ayudándome también a sentarme en la silla del escritorio.

-Ahora me voy, espera a que por lo menos me recupere un poco de la reciente vomitona- Digo yo, secándome el sudor de la frente por el esfuerzo.

Kate asiente y se va de mi despacho.

Un rato después, cuando ya estoy mejor, recojo mis cosas y me voy a mi casa.

Una vez llego allí, me cambio de ropa y me tumbo en el sofá, me pongo cualquier cosa en la tele mientras lentamente mis ojos se van cerrando.

-Elle, despierta- Dice una voz mientras yo lentamente voy abriendo los ojos. La dueña de esa voz es Kate, que tiene unas lágrimas en los ojos.

-¿Qué te pasa?- La pregunto, acomodándome en el sofá rápidamente, Kate se sienta y me toma la mano.

-Han encontrado el cuerpo de Alex en un tranvía, estaba demacrado y muerto, según los agentes, murió el sábado, le están haciendo la autopsia todavía, pero he pensado que deberías saberlo...- Dice Kate, secándose las lágrimas que caen por sus rosadas mejillas.

-¿Y lloras por eso?- Le pregunto yo, no quiero ser cruel, pero un sentimiento pequeño de alegría se instala en mi pecho, me siento muy cruel.

-No- Dice Kate

- ¿Y entonces porque lloras? - Le digo yo, con las lágrimas a punto de salir, y no lloro porque Alex este muerto, sino porque no le volveré a ver en mi vida, y por una parte me alegra.

-Porque estoy embarazada- Dice Kate, sonriendo y llorando más.

-Oh dios, Kate me alegro mucho por ti- Le digo, acercándome mucho a ella y estrujándola entre mis brazos.

-¿Y Paul lo sabe?- Pregunto yo

-No, he ido al médico para los resultados de unos análisis y me han dicho que estoy embarazada de una semana y media- Dice Kate.

-Kate, ¿vas enserio con Paul?- Digo mirándola a los ojos.

-Sí, me gusta mucho, y me atrevería decir que estoy enamorada.

- Pues me alegro, pero si te hace, lo más mínimos, se queda sin descendencia- Digo.

-Bueno, no sin descendencia- Dice Kate, señalándose la tripa y sonriendo.

-Bueno, haré la excepción con él.

Pasamos Kate y yo la tarde hablando y organizando la sorpresa para decirle a Paul que Kate está embarazada y entre eso y que no he parado en todo el día, Kate y yo no paramos de bostezar, así que, apagamos todo y nos vamos a dormir.

A la mañana siguiente, Kate me dice que no vaya a trabajar, ya que he vuelto a vomitar esta mañana. Acepto a regañadientes y me quedo en la cama. Debería ir al médico a ver que tengo, pero ya iré.

A la una y media, me siento inspirada, así que cojo un lienzo en blanco y me siento enfrente del caballete. Pongo música y la primera que suena es la de What a time de Julia Michaels, mientras pinto, dejo que mi inspiración fluya y conecto mi mente con mi mano.

Como una o dos horas después ya he acabado, y al ver lo que he pintado un escalofrío me recorre la espina dorsal, y, sin importarme nada, lo cuelgo en mi habitación, después bajo y me preparo la comida, una ensalada normal y corriente, no me apetece cocinar, y tampoco es que pueda oler nada, tengo la nariz congestionada y no huelo nada.

Cuando termino de comer me tumbo en el sofá y me pongo una peli, a la que acabo llorando como una magdalena.

Me pasé el resto de la tarde llorando y riendo, muy bipolar por mi parte. Luego me puse a pintar otro cuadro y tres horas después ya había llegado Kate, con la que había llorado y me había estado riendo, dijo que estaba loca pero que no le quedaba otra que aguantarme, nos quedamos en la habitación hablando de la sorpresa para Paul.

-Deberías irte a dormir, te vendrá bien para el catarro ese que tienes- Dice Kate

Asiento con la cabeza y me voy a mi cuarto, los sueños han seguido, pero no me han dicho nada de la muerte de nadie, no sé, se habrá rayado el ser ese o no sé.

Al momento cojo el sueño, y no sé cómo, voy por la casa durmiéndome en cualquier sitio.

Al día siguiente Kate y yo hablamos de la sorpresa, y todo está listo, llamamos a un amigo de Paul, nos dice que está en el despacho dejando unas cosas listas, y Kate y yo nos dirigimos allí, cuando llegamos, dejamos un body de bebé con la frase Dentro de 9 meses te conoceré papi. Llamamos la puerta, Kate sujeta el body, Paul abre la puerta y yo suelto un tubo con confeti.

-No...no puede ser- Murmura él.

-¡SORPRESA!- Gritamos Kate y yo, al unísono, a lo que Paul responde besando y abrazando a Kate con efusividad.

-¿E...estas em...embarazada?- Dice él, con las lágrimas en los ojos.

Kate asiente y Paul besa todavía con más efusividad a Kate.

-Te quiero- Dice Paul. Me llevo una mano a la boca por la sorpresa y Kate se toma unos segundos para procesarlo.

-Te quiero muchísimo Kate- Dice de nuevo él, poniéndole la mano en el estómago de ella.

-Te quiero más, Paul- Dice Kate, llorando mucho más de lo que ya estaba, hasta a mí se me saltan las lágrimas de lo bonito que es todo esto.

-Oye- Digo captando la atención de ambos- Que sin mí esto no hubiese sido posible, agradecedme que me encontraba bien y no andaba vomitando como una loca por la casa- Digo yo, causando unas risas por parte de los tortolitos.

-Gracias Elle- Dice Kate, que besa más a Paul.

Ahora sé que aunque este condenada de por vida, solo puedo vivir la vida aunque el ser ese extraño me lo ponga difícil, viviré todo al máximo, y todo gracias a el sueño.