——Ramsés~——¿Mo-Moisés? —atrapó a su hermano en el instante en el que él cayó inconsciente, evitó un posible accidente, Moisés pudo haberse herido ante esa casi caída——. Mierda, hermano ¿Qué te sucedió?, hueles mucho a alcohol. —como si fuera el golpe de la razón hizo que reaccionara——. Oh Dioses, ¡estas hebrio!
Era una alegría para él hallarse con un nuevo Moisés, digo, eran una de las poquísimas veces que podía ver a su mejor amigo y hermano estar tan ido de alcohol en su sistema. Hasta sería capaz de llamar a los escribas para relatar cada una de las próximas facetas que tendría.
——Veo que la pelea que tuviste con Nefertari fue muy dura, ¿eh? —cargarlo en sus brazos no le era de inconveniencia. Moisés, aunque pareciera ser bastante corpulento, era casi como una bolsa de granos para el príncipe, quiero decir, ni muy pesado ni tampoco muy liviano, él era fácil de cargar——. Por Isis, ¿tendré que llamar a Paser?; estarás en muchos problemas con Disebeck, dudo que con mi hermana lo estarás.
——Nefertari~
——Oh no, no. Estas con Ramsés, Ramsés. —trató de sonarle claro, quizás la bebida hacía que perdiera los sentidos de ver bien las cosas y esté alucinando que está ahora mismo con la hija de sacerdote del palacio——. Vamos Moisés, no me mires con esa cara. Yo no soy Nefertari.
——Nefertari~ —se apegó a él demasiado, hizo que el palpitar del príncipe fuera a mucha velocidad——. Perdóname, no quise hacerte enfadar de ese modo. Dejaré de hablar de mi familia hebrea por ti.
——¿Se enfadó por esa idiotez? Por los Dioses, hasta yo me enfadaría, ¿por qué sigues tratando ese tema, idiota? —separó a su amigo tomándolo por los hombros para reprocharle correspondientemente.
——¿Ramsés?~
——Sí, ¿quién más sería?, ¿el dios Horus? —aunque lo halla dicho por sarcasmo, literalmente, él es Horus vivo en la tierra y pronto lo sería oficialmente cuando ocupara su lugar en el trono de los dos Egiptos.
——Ramsés~... Nefertari dijo que no quería volver a hablarme ni verme. —de pronto comenzó a llorar como un niño infantil, no, ese Moisés era tan raro que ponía incómodo al príncipe.
——Ah... Creo que debería de llamar a Paser para que prepare un té que logre bajarte la borrachera. Eres raro en ese estado.
——¡Detente!, ¡No te vayas hermano! —impidió su ida saltando encima suyo, cayó encima de él. Se aferraba a su abdomen como una garrapata——. No me abandones Ramsés~
Aquellos mofletes rojos, el ligero hilo de saliva que salía de su boca y aquellos ojos cubiertos por lágrimas solo hicieron que Ramsés pensara en una sola cosa...
Es... Jodidamente adorable.
Moisés era una persona de buen aspecto, no solo hubieron filas de posibles pretendientes dentro del reino y fuera sino que, también llamaba poderosamente la atención a los hombres. Uno de ellos puede ser el mismo. Ramsés pensaba que su sobrino y hermano de crianza era tan lindo y sexi al tiempo que podría igualar las caderas a cualquier mujer del palacio.
Tenerlo encima de él era una tortura.——Moisés, dejame ir.
——No.
——Moisés... Lo digo por tu bien. —advirtió recibiendo una risa de parte del príncipe hebreo.
——¿Y qué planea hacer el futuro Horus vivo en la tierra a este hebreo desobediente?
Tuvo que taparse la boca ante tal pregunta demasiado tomada a la ligera para la mente de cualquier pervertido.
Moisés era tan irresistible.
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❝𝐅𝐔𝐄 𝐔𝐍 𝐄𝐑𝐑𝐎𝐑 ───𝗶 𝗱𝗼𝗻'𝘁 𝗯𝗼𝘄 𝘁𝗼 𝗺𝗲𝗻✓
Romance𝕱𝐔𝐄 𝐔𝐍 𝐄𝐑𝐑𝐎𝐑 : ̗̀ el diablo solo susurra a tu oído los actos malos, es tu elección cometerlos o no. Moisés se siente presionado por Ramsés. Sabe que lo que hizo con é...