LA OBSESIÓN

Capitulo 2

-Buenos días cariño.-Escucho esa voz cerca de mi oído pero no logro saber de quien es. Me levantó y me paso la mano por la cara con pereza , cuando volteó es less está con un brazo cruzado por mi abdomen y la cara apoyada en mi pecho.

-¿Qué haces todavía aquí ? Debe ser muy tarde y si te encuentran con migo será un lío , hasta podrían dejarme otro mes aquí.- le reprochó enojado.

-Cálmate no hay nadie en el pasillo es día de las tareas en el patio recuerdas. Vinola supervisora a llamar un par de veces pero no le preste atención.- no puedo creer que esté hablando tan calmada. Pero es lógico por que esta loca como todos.

-¿Queee?. Vino la supervisora y no me llamaste , podría estar en problemas por eso less y tu también. Si llega a pasarle algo a mi salida te las verás con migo.

-Ya no te enojes. Es que te veías tan hermoso durmiendo que no pensé que fuera necesario despertarte amor.- puso su estupida cara de cachorrito arrepentido. De verdad cree que me va a convencer con eso.

-No me llames amor , sabes bien que lo nuestro nunca pasará de esto. Te lo aclaré desde la primera vez que tuvimos sexo, esto es solo eso.- se que cuando me vaya encontrará un nuevo pasatiempo.

-Ya, ya lo sé , pero nada cuesta intentar no crees - reprimió una risa.

-Ya cállate y comienza a vestirte, hay que salir.- puede que la extrañe un poquito cuando salga pero si todo sale bien nos veremos las caras pronta mente.

Ella fue directo al baño se cambió y se fue. Luego entré yo. tomé ese momento en el baño para pensar en todo lo que haría al salir de este lugar , definitiva mente tenía que vivir con mis padres por que aún era menor de edad pero ya no faltaba tanto para ser mayor y liberarme de ellos también , cuando tenga la mayoría iré a vivir con un primo por unos días hasta que me pueda conseguir donde vivir solo. Si lo hago así todo será perfecto.

Salí y me vestí con el ridiculo uniforme. Cerré el cuarto y salí al patio. Cuando abrí las puertas estaban haciendo ejercicio , algunos sentados hablando , otros en su mundo las personas de aquí solían ser muy raras aunque era lógico por que esto es un puto psiquiátrico.

-Buenos días señor Fairchild , quiere decirme donde estaba metido esta mañana fui a su pieza y parece que no estaba.- habló la supervisora que estaba a mi lado con una libreta en la mano.

Mierda , no podía decirle que estaba con Less o eso me traerá muchos problemas y inconvenientes para mi salida.

-Estaba durmiendo , tengo el sueño muy pesado.-le contesté con una sonrisa de lado. Soy muy bueno ingeniando mentiras de último momento.

-Bueno debería saber bien que los lunes es día de entrenamiento en el patio, debería estar más entusiasmado.- me reprochó ella mirando su libreta y tachando no se sabe qué.

Que si entusiasmado , estaba que saltaba de la emoción por fin dejaría de verle su horrenda cara cada día pasando a inspeccionar todo. Ella es la que más odio de este lugar.

-Claro supervisora me despertaré más temprano la próxima vez.- esto de ser amable me estaba matando.

Pero es que no había próxima vez , bueno tal vez regresaré aunque le prometí al Doc que no me vería más por aquí bueno mentí un poquito.

-Todos dentro es hora del desayuno -habló la supervisora.

Cómo ordenó todos fuimos hacia el comedor , nadie desobedecía por qué si lo hacían los castigos eran horribles te bañaban con agua muy caliente y te maltrataban con látigos se los digo yo que llegue a sentir ese dolor.

Todos tomarón asiento y se sirvieron a su antojo , yo solo tomé una manzana verde y me senté al final de la fila a comerla con calma.

-SEÑOR FAIRCHIlD , POR FAVOR PASÉ A LA OFICINA DEL DOCTOR DILTÓN.

Esa es mi señal. Tiré la manzana al zafacon e hice una salida triunfante. No se si les dije que soy muy popular entre las chicas y no es por ser egocéntrico pero creo que también entre los chicos , todas se me quedaban mirando con deseó pero bueno no todas tienen suerte solo Less que llegó a probar mis buenas folladas.

Caminé por los grandes pasillos de la institución hasta ver la puerta acristalada de la oficina del Doc. La abrí y me golpeó ese encantador olor a aire acondicionado.

-Hola muchacho pasa y toma asiento.- me señaló la silla delante de él.

-Hola doc- aunque no quería se me notaba la alegría en el rostro.

-Té llame para hablarte con respecto a tu salida de aquí.- hablaba mientras llenaba unos papeles.

Eso lo sabía de sobra pero vamos a hacer como que no

-Ah no me acordaba pero dígame.- lo miraba emocionado a él y a los papeles.

-Termine de llenar tu papeleo , firma aquí-me pasó un bolígrafo y unos papeles los tomé y con gusto firmé.

-¿Para que son?- le dije curioso.

-Solo para que puedas salir , tus padres igual firmarán- dijo el con simpleza.

Mis padres , tengo mucho que no los veo. Bueno tampoco ellos me visitan, dijerón que estaban muy decepcionados de mi aunque no se por que si no e hecho nada , solo por que le rompí la pierna al chico que me molestaba en la escuela y le asesine tres máscotas al vecino , pero les aclaré eso el chico no paraba de molestarme y los perros ladraban mucho fuerón accidentes solo eso.

-En media hora estarán aquí , ve a tu habitación por si quieres llevarte algo con tigo , luego te avisarán cuando estén aquí -dijo el aún mirando los papeles

-Oh claro qué hay algo que quiero llevarme, gracias doc.- salí con una enorme sonrisa en mi rostro. Tres años sin ver la luz del sol a menos que no sea ir al patio. Ya era hora de salir de verdad.

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