Clima de emociones.

Un amanecer Soleado

Han pasado 6 días desde aquella noche lluviosa, donde estuve a punto de terminar con todo, sino hubiera sido por ella ahora mismo no estuviera acostado en mi cama, ¿ella salvo mi vida? O es que, ¿yo no tuve el valor para aventarme de aquel puente?, ahhh darle vueltas al asunto no cambiaría nada, mañana ya es lunes y estaré en el mismo salón con Sandra, curiosamente no he dejado de pensar en ella toda esta semana, ¿acaso me habré enamorado?, ahhhh –Pensaba Rodrigo mientras estaba acostado-

- ¡Hijo ve a comprar la leche para el desayuno!

- Voy mamá

Bueno aquí comienza mi día, yendo por la leche para el desayuno, siempre me he preguntado porque siempre tengo que ir yo, Rodrigo has esto, has lo otro, siempre a mí, nunca a mi hermano Erick –Pensaba Rodrigo mientras bajaba las escaleras-

- Mamá ¿Por qué nunca va Erick? –Decía Rodrigo mientras recibía el dinero para la leche-

- Hijo él está estudiando, déjalo.

- Está bien. –dije mientras salía-

Eso de que mi hermano siempre está estudiando me resulta extraño, siempre que baja a desayunar parece que apenas se despertó, nunca lo he visto haciendo tarea, tal vez es un genio como dicen. –Le daba vueltas al asunto mientras iba y regresaba de la tienda-

Así fue la mañana de Rodrigo llena de cuestionamientos, hasta la tarde.

- Mamá iré a ver a Juan, vengo en la noche.

- Okey Hijo, pero no llegues tan tarde, mañana es tu primer día en la universidad tienes que dar lo mejor de ti, para que no avergüences a tu hermano, que solo le faltan dos años para salir.

- Ah sí. –Otra vez, "da lo mejor por tu hermano" ¿acaso yo no valgo por mi mismo? - (Pensaba enfurecido).

Rodrigo iba camino a la casa de Juan que, por cierto, Juan era amigo suyo desde que eran pequeños, Juan es un año mayor que Rodrigo, a pesar de eso él siempre ha sido para él un hermano mayor.

Toc, toc, tocaba la puerta de Juan.

- ¡Rodrigo! –Decía Juan al abrir la puerta-

- Juan ¿Cómo estás?

- Bien, bien, te parece si vamos por un helado para platicar, este mis padres se acaban de pelear y las cosas están tensas.

- Oh, está bien, vamos.

- ¿Y bien que sucede? –Preguntaba Juan mientras los dos comían helado sentado en un parque cerca de sus casas-

- Recuerdas que te conté lo del puente...

- Sí y si piensas en hacerlo de nuevo, te golpeare.

- No, no, lo que pasa es que no dejo de pensar en Sandra, ya quiero que sea mañana para verlas, no puedo dejar de pensar en ella, pero al imaginar que estaremos en el mismo salón me pone nervioso.

- Significa que estás enamorado jaja, mira es bueno que estés enamorado, pero mañana intenta no verte como un perdedor ante ella, o aún peor intenta no verte como un acosador, menos en estos tiempos, donde varias acciones te pueden hacer quedar como un acosador, mira es un nuevo inicio, es el momento que empieces a dejar atrás tus inseguridades y te llenes de confianza, iremos a la misma universidad, si algún día necesitas ayuda dime con confianza, eres como el hermano menor que nunca tuve Rodrigo. –Decía Juan mientras acababa su helado-

Después de hablar de Sandra, Juan y Rodrigo hablaron de cosas triviales, como cuál sería la próxima amenaza que saldría en el nuevo número de los Herederos, el libro que próximamente se publicaría en wattpad, luego de una gran charla, los dos se despidieron y cada uno se fue para su casa, lo que le paso a Rodrigo después de eso, fue normal y tranquilo.