𝙸'𝚕𝚕 𝚋𝚎 𝚝𝚑𝚎𝚛𝚎 《 ᴶᵉᵒᶰᵍˢᵉᵘᶰᵍ ∞ ˢᵉᵘᶰᵍᴵᶰ 》

Abrázame, por favor

❕❕ ESCUCHAR, PARA UNA MEJOR EXPERIENCIA ❕❕

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— JeongIn, sueltame

El agarre del contrario sobre su muñeca se había vuelto un poco más firme, pero sin llegar a dañarlo. Podía sentir desde su lugar como el menor batallaba por no dejarse llevar por sus emociones y causarle algún tipo de daño.

Suspiró, tratando de calmarse el también y calmar a quien lo había sacabo de aquel bar, en la media noche de un viernes.

— Innie, por favor...

Aquello pareció entrar en la cabeza del nombrado, trayéndolo a la tierra y pronto detuvo su andar, sin soltar la mano de SeungMin.

El silencio era muy afixiante para el mayor de los dos. La oscura y desolada calle en donde estaban, no ayudaba en nada a su imaginación. Pero, ¿Que tenía al menor tan metido en su cabeza que lo tenía muy callado?

Claramente, SeungMin no supo decifrar el silencio del contrario y trató de hacerlo hablar

— Innie...

— ¿Te averguenzo, Minnie? — preguntó en un tono bajo JeongIn, mirando al frente.

— ¿Avergonzarme? No claro que no, ¿por qué preguntas eso? — contestó rápidamente.

La mirada del menor por fin se alzó hacia él, viendo claramente el destello de tristeza y otro sentimiento, que no supo descifrar en ellos, cuando lo miró también. Ahí supo que había hecho algo mal y lo peor de todo, es que ni sabía que le estaba pasando al menor, porque éste era tan impredecible que le era muy difícil saber si estaba enojado, triste o celoso de él.

SeungMin por un momento creyó que todo había sido una simple broma por parte de ambos y siendo guiado por ese pensamiento, comentió el error de dejarse llevar por JiSung quien lo había arrastrado hacia aquella fiesta de cumpleaños del príncipe de la Universidad, Hwang HyunJin.

Un chico muy hermoso y perfecto en todos los entidos. Claramente se sentiría amenazado si JeongIn lo viera, es decir, hasta el casi cae en sus encantos si no tuviera al dueño de su corazón frente a él, debatiéndose si reclamarle o abrazarlo. Había omitido cierta información a JeongIn antes de salir del departamento que estaban compartiendo juntos y este no había dicho nada.

¿Cómo se sintió en ese momento? Molesto. Parecía no importarle en casi nada a JeongIn y eso hasta cierto punto parecía no haberle importando, hasta ahora.

La mente del menor era tan indecifrable que ni siquiera sabría decir si le diría que lo odiaba y que terminaba con él o que le dijera que le fue infiel primero, y que ya lo aburrió.

Aunque nunca llegaron a segunda base.

De hecho, ni su primer beso como pareja se habían dado.

— Somos novios, SeungMin. — comenzó, mirando fijamente al mayor — Sé que... no soy el tipo de novio que esperabas. De esos que te toma la mano en público o te da besos hasta cansarte. De hecho, ni hemos dado nuestro beso, ahora que lo recuerdo — murmura, revolviendo su cabello color menta, dándole una imagen demasiado atractiva al mayor quien sólo desvió su mirada y rascó su brazo, estando de acuerdo con lo que sea que vaya a decirle el menor — Pero aún así me importas. No me molesta que vayas a fiestas, me molesta que no estés cómodo conmigo, como tu novio.

SeungMin frunció su ceño, decidido en encarar a JeongIn, pero este ganó la palabra

— Le pregunté a JiSung si te había visto. A él, a ChangBin. A Felix. Incluso a HyunJin