La Tormenta Negra(ブラックストーム)

Mejorando el Rasengan!!

Han pasado dos semanas desde que Jiraiya se fue y Naruto comenzó con el tercer y cuarto volumen de Fuinjutsu, para este punto todo el pueblo Konoha se habia enterado del estado tan delicado de Hiruzen, la semana anterior ni siquiera pudo levantarse de su cama y en este momento se encontraba recostado en una cama en su casa, no quería morir en un horrendo hospital donde estaba lleno de medicamentos y drogas, por lo menos eso era lo que habia dicho, este se encontraba frente a toda su familia y la actual quinta Hokage, Naruto a un par de metros dejando espacio, frente a todos ellos se encontraba un Konohamaru sollozante, era obvio que estos eran sus últimos momentos, nadie podia evitar que pasara, ni aunque Tsunade diera todo de ella en ese instante para intentar salvarlo era imposible

Ojiisan, lloro tomando su mano, Tatsu Sarutobi, el segundo hijo de Hiruzen, solo puso una mano sobre el hombro de su hijo, aunque no lo demostraba y no lloraba, tambien le dolía ver a su padre en ese estado, su esposa, una mujer de cabello negro con un forma Kimono negro puso una mano en la espalda de Tatsu intentando en vano reconfortarlo

no estén tristes, dijo con cansancio y lentitud el viejo Sarutobi

yo- siempre estaré con ustedes, dijo antes de dar una tos seca mientras sonreía, Naruto solo veía esto apretando los puños, fue como esa vez, solo pudo ver como una persona preciosa Moría justo frente a sus ojos, el era su abuelo, la persona que lo cuido cuando nadie más lo hizo, la que lo mimó y protegió siempre que pudo, y por último, la persona que hizo que fuera quien era hoy en día

no te vayas, suplicó Konohamaru

todos moriremos un día Konohamaru-kun, hoy- hoy es mi momento, siempre estaré en sus corazones, dijo con una sonrisa pacífica, como todo Shinobi, tenía arrepentimientos, pero por lo menos moriría junto a su familia, personas que lo amaban, fue por eso que no se rindió en los momentos más difíciles, a lo lejos vio a Naruto que tenía la cabeza gacha y los puños apretados

Naruto-kun, llamó con cansancio, Naruto levantó lentamente la cabeza y caminó aún lado de la cama de Hiruzen, todos se hicieron aun lado y dejaron pasar a Naruto

tu- siempre has sido alguien tan fuerte, tan determinado, hubo veces en las que pensé que no te merecía, no importaba que nunca te rindas y sin importar lo mal Hokage o lo mal persona que fui, tu nunca te separaste de mí, dijo con una sonrisa mientras poco a poco sus ojos se cerraban

siempre estaré con ustedes, dijo y lo último que vio fue la imagen de un Naruto más pequeño mirándolo con lágrimas corriendo por su rostro, 

te lo prometo, seré el mejor, fue lo último que escuchó antes de morir pacíficamente con una sonrisa, era obvio para todos que murió feliz, sin poder soportarlo más, todas las mujeres, sin importar su edad, lloraron, los hombres solo bajaron la cabeza y Konohamaru se aferra a Naruto que se agachó y abrazó a Konohamaru, una determinación como el sol brillando en sus ojos normalmente helados

(Te prometo que cuidaré de todos, Konohamaru, Asuma, Tsunade, todos aquellos a quienes ambas, se prometió silenciosamente mientras apretaba un poco más a Konohamaru en su abrazo)

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han pasado 2 días desde la muerte de Hiruzen y todas las naciones elementales habian sido sacudidas con fuerza por dos Shinobis, ellos fueron Hiruzen Sarutobi y... Uzumaki Namikaze Naruto, este no solo habia aniquilado a sus enemigos sin dudarlo, si no que tambien gano mas respeto entre sus aliados en nunca dejar que alguno de ellos muriera en una de sus misiones, en cuanto a la muerte de Hiruzen, sacudió todas las naciones elementales por que el Kami no Shinobi habia muerto, dejando "vía libre" a algunos Shinobis estúpidos que creyeron que como su más grande estratega murió podrían aprovechar el caos e infiltrarse en Konoha para hacerla suya