capítulo 3

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Y como si se tratase de una cerradura esta se rompió al oir aquel nombre, el demonio se llevo sus manos a su cabeza, el angel no comprendia el porque de la accion solo lo veía, temió por su seguridad mas, quería estar seguro que Alfred estuviera bien

Flotaba, no comprendía que pasaba, miro a su alrededor, estaba solo pero sentía paz, supo que su mente quería mostrarle algo, sabía que su cuerpo seguía en aquella habítacion

"Arthur ¿Quien eres?"

Una luz comenzó a brillar, se hacía más potente, está le alcanzó transformándolo en aquel arcangel, luego aquellos recuerdos llegaron

Abrió sus ojos ante tantas escenas, todas diferentes pero siempre tenían el mismo factor en común...el y Arthur estaban juntos, sus esencias siempre se buscaban a travez del tiempo y ahora habían llegado hasta aquí, dónde podrían continuar su historia por el resto de la eternidad

" Arthur, mi Arthur, tú eras lo que estaba buscando, por eso me sentía tan vacío'

La luz se fue apagando y con ello su mente volvió, miro que ese angel lo veía preocupado pues al parecer se había quedado mirandole fijamente sin moverse, solo continuo mirando esos ojos verdes dónde ya antes de había visto reflejado

El demonio vio fragmentos, respuestas a  aquellas preguntas que momentos atrás inundaron su mente, aquel nombre, ese nombre, esa esencia, era lo mas valioso para el

- te estuve esperando todo este tiempo, al fin has vuelto a mis brazos y está vez nadia nos volver a separar jamás, es una promesa , Arthur-

No sabia el porque de aquellas palabras, no comprendia porque tanto afecto a su persona por aquel angel que ahora era un caído, un desterrado de aquel mundo lleno de prejuicios, mas sabia solo una cosa, no quería que ese sentimiento se fuera , le hacía recordar una sensación que sentía había muerto en su interior desde hace tanto….le hacía sentirse vivo

Lo llevo a su hogar, lo llevo a aquella habitación que desde la primera vez que lo vio se tomo la molestia de hacer ese espacio para el, lo recostó, el angel solo se quedaba mirando por aquella ventana, el panorama no era el mismo que recordaba siempre que habría los ojos, esa luz brillante ya no inundaba estos, ahora era una luz roja lo que invadía ese ambiente

Ya había perdido la cuenta de cuanto tiempo había pasado desde que había sido desterrado, ya su cuerpo se estaba acostumbrando a la sensación de el cambio de clima, no había salido de la cama, es mas nunca se le ocurrió salir de aquel cuarto, no confiaba de todo en ese demonio que era el único que  lo visitaba, solo le traía la comida y se quedaba para ver que  se alimentara por completo, ahí estaba nuevamente ese demonio, dejándole aquella bandeja sobre sus piernas

- come, lo necesitaras, el proceso será doloroso-

el sabia muy bien sobre lo que hablaba mas la cara de confusión del angel era la misma siempre, no comprendia porque siempre le decía  aquella frase

- claro, ya me estoy acostumbrando  al sazon que en este lugar estar acostumbrados a comer-

respiro profundamente y comenzó a saborear el platillo, bajo la atenta mirada del demonio hasta que se termino todo, la primera vez había dejado solo un poco, el demonio no salio de esa habitación hasta que le volvió a dar hambre y termino lo que había dejado en el  platillo, solo asi el dominio abandono la habitación, repitió lo mismo un par de veces hasta que su teoría fue resulta
“ se  va cada que termino de comer “

Mas no era lo único que ese demonio hacía en ese cuarto, mientras el ángel dormia el lo miraba , veía a aquellos detalles de su rostro, tocaba esos cabellos rubios y las pocas plumas de sus alas, recordaba como era el antes de ir a ese mundo, pero también quería grabar en su memoria aquel rostro de ese angel que sabia dentro de poco se abría transformado en uno mas de ese mundo

Cuando nos volvamos a ver Donde viven las historias. Descúbrelo ahora