Lost in Nightmare

Capitulo 1:

Como siempre, a mi clase y a mi nos tocaba inglés en el aula 21. No me gustaba la clase, ya que entraba mucha luz. Entré y me dispuse a observar. Mónica se sentó en primera fila para escuchar mejor a la profesora, haciendo así que Ana no tuviese sitio, por lo que, tuvo que sentarse en una mesa cerca de la puerta. En la parte de atrás de la clase, había unos ventanales enormes, con cortinas rotas, de plástico, que siempre corrían para dejar pasar la luz. Me senté en una de las últimas filas, junto a Luis y Noelia. Noelia, era una chica alta, con un pelo rubio y corto que casi siempre llevaba recogido ya que lo tenía muy estropeado y encrespado. Su ropa era infantil, siempre con algo de color rosa, unas botas rosas, unos pantalones negros, una camiseta roja y un forro polar rosa. La verdad es que tenía mal gusto. En mi opinión, Noelia era muy inteligente, la más lista de toda la clase. Luis, era un chico bajo, con unas gafas muy peculiares. Tenía el pelo muy oscuro, con un peinado muy sencillo. Su ropa no estaba mal, y a la vez era cómoda. Era muy egocéntrico, y sólo pensaba en si mismo. Miré a la profesora, su rubio cada vez era más artificial. Todo estaba tranquilo, aunque como siempre, Luis se puso a gritar y debatir cómo siempre hace. Abrí el libro y la libreta de la asignatura y me puse a hacer lo que la profesora indicaba.
Un tiempo después de esto, la ventana de la puerta se ensangrentó, de la nada, todos se quedaron mirando, algunos reían, otros se asustaron, yo sólo mire.
La profesora fue a mirar que había ocurrido, mala idea por su parte. La puerta cayó encima de ella.
Eran una especie de infectados o zombies por así decirlo. Todos se volvieron locos. Yo seguí observando. La gente abrió las ventanas antes mencionadas e intentó escapar por ahí. Todo se volvió una locura. Ví cómo Luis salió de la clase corriendo, junto con mas gente.
Noelia se quedó en shock. Yo tiré de ella y le grité pero ella estaba tirando de su chaqueta que había quedado atascada en la silla. Parecía como si no me oyese, ante aquel cahos, no pensaba quedarme allí a ver cómo Noelia moría, así que me fui corriendo de la clase. Corrí por el pasillo de las veintes, llegando al de las ceros, al ver que no podía ir al patio central porque todo estaba lleno de esas cosas, corrí hacia los talleres, mirando hacia atrás y viendo cómo gente intentaba escapar y moría en el intento.