C18. Otra Oportunidad

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Después de haber dado de comer a los cerdos, me fui hacia el granero, debía sacar a Hidalgo, darle de comer, darle de comer a Dashuri, recoger los huevos y limpiar dentro del gallinero, regar los sembradíos y recoger las verduras maduras, para rematar con limpiar el corral de las vacas... Si bueno, eso será hasta el final

Saque a Hidalgo y le llene su traste con comida y agua, serví la comida para Dashuri y llené una cubeta para que bebiera
Cuando estaba por salir, no faltó hidalgo queriéndome morder los zapatos, pero aún así, caminé hacia el galletero

Okey, creo que esto será difícil

Ya intenté muchas veces querer darles de comer a las gallinas y en todas esas veces salgo lastimada, mis tobillos en verdad me duelen

Tomo la cubeta con el alimento y me coloco frente al gallinero, unos 2 metros alejada frente a este, comienzo, como si fuera un hada mágica, comencé a regarlo por el lugar, así todas podrían correr hacia su alimento, camino hacia el gallinero y pienso por unos segundos... Tras de mi están las cubetas donde había traído los desperdicios, ya las había lavado

La idea llegó a mi y no la pensé dos veces, la coloco justo a un lado de la puerta del gallinero y meto los pies dentro de la cubeta, me estiró y abro la puerta para dejarlas salir, aquellas salen super rápido y ninguna se me acerco, salí de la cubeta cuando todas ya estaban fuera, me metí al corral y cerré la puerta, rápidamente comencé a lavar el interior, sacar los restos de huevos rotos, excremento de las gallinas y dejar todo limpio para volverlas a meter

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Okey, solo me falta regar los sembradíos y limpiar el corral de las vacas... Este último en verdad no quiero hacerlo, es demasiado asqueroso
Así que mejor voy a regar el sembradío, tomo la manguera y la arrastro hasta el sembradío, escuchó perfectamente las patas de Hidalgo correr hacia mi, me soy la vuelta y lo apunto con la manguera

Hidalgo y el lodo son los mayores causantes de que mis zapatos este arruinados, no puedo permitir que eso siga pasando

—Alto ahí, perro malo —Dije apuntando, como si el perro fuera a entenderme, se detuvo —No me obligues a abrirle a la manguera, porque no te gustará —Dije mirándolo —Vamos Hidalgo, se más gentil conmigo que te doy de comer todas las mañanas... Dejando de lado de que a veces mojo las croquetas y tiro el agua, hoy te las di secas y solo regué un poco de agua —Dije mirándolo, el perro sin más se echó al suelo, un poco confundida con lo ocurrido, simplemente me doy la media vuelta y comienzo a abrirle a la manguera, para que el agua se riegue sobre los sembradíos, corría sobre la tierra antes de que se convirtiera en lodo y arruinara mis zapatos

Cuando estaba por pasarme el siguiente sembradío, me doy la vuelta y me percató de Christopher, está ahí, observandome fijamente

Me quedo quieta, observandolo desde mi lugar... Estaba ahí, de pie recargado sobre un costado de la casa, con unos jeans muy descoloridos por el sol, una botas negras y una camisa sin mangas, dejando ser sus brazos... Unos brazos fuertes, traiga una gorra puesta y esa cara de seriedad que siempre suele tener

Tan guapo y tan hijo de puta... Ups, perdón Yenny no quise ofenderte

Pero era inevitable no hacerlo

¿Ya habló con mi padre?

¿Apenas irá allá?

¿Viene a regañarme? Ay no por favor, ando muy sensible últimamente —Dije con una mueca, él solo alza un mano y me hace una seña de que me acerque a él, suelto la manguera y voy hacia él a paso apresurado

Pero cuando estoy por salir, mi zapato se hunde en el lodo y me hace tropezar, dejándome sobre el suelo

¡Auch!

Pareciera que mi cara rebotó sobre la tierra, cuando quiero levantarme, siento como me toman de los brazos y me alzan, mi vista se va directamente sus ojos

—¿Estás bien? —Me pregunta mirándome con esa sonrisita burlona

—Ya anda, puedes reírte —Dije mientras me sacudía con cuidado la ropa, él solo niega

—No enserio ¿Estás bien? ¿Te duele algo? Porque fue un golpe fuerte —Dice y yo niego

—Estoy bien, pero ¿Qué ocupabas? —Pregunté

—¿A qué hora despertaste? No te escuché —Me pregunta mirándome a los ojos

—Hace como 1 hora y media, pero salí rápidamente para empezar con mis tareas, ya solo me falta limpiar el corral de las vacas y pues los otros dos sembradíos, pero dame uno minutos y...

—No —Dijo seriamente, yo solo lo miro

¿Acaso ya habló con papá?

No, por favor no

No quiero decepcionarlo otra vez, solo necesito otra oportunidad para demostrarle que sí soy capaz...

De la Nada a Todo||C.V.&TÚ||TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora