S C A R L E T T
Me desperté con sábanas suaves y la luz de la mañana que se filtraba a través de las persianas. Deshaciéndome de los destellos restantes de un sueño, mis ojos todavía estaban cerrados mientras me sumergía en el calor del cuerpo desnudo de Harry. Lenta y a regañadientes, mis ojos se abrieron, tratando de hacerme una idea de la posición en la que Harry y yo estábamos. Mi mejilla estaba metida en la calidez de su espalda, mi muslo entre sus piernas mientras mis brazos se enrollaban alrededor de su torso, abrazando el suyo de vuelta a mí. Una suave sonrisa divertida tiró de mis labios cuando lo sentí apretar mi mano que sostenía contra su corazón, haciéndome darme cuenta de la posición en la que estábamos. Harry era la cuchara pequeña.
Mis labios se fruncieron contra su omóplato, el calor de su piel calentó mis labios mientras lo sentía arrastrarse un poco. Se movió lentamente en mi agarre; los brazos se enrollaron con fuerza alrededor de mi abdomen, se acurruco en mi pecho y mi muslo cubrió su cintura. Su cálido aliento salió en breves bocanadas mientras dormía profundamente, pequeños murmullos de agradecimiento se le escapaban cada vez que pasaba mis dedos por sus suaves rizos.
Nos quedamos ahí por un par de minutos más, Harry roncando levemente mientras yo jugaba con sus rizos con una suave sonrisa en mi rostro, recordando los eventos de ayer por la noche. Mis mejillas se sonrojaron levemente, una sonrisa tonta tiró de mis labios cuando recordé lo que dijo sobre mis senos. Dios, amo tus tetas. A veces podía ser tan vulgar y atrevido. ¿Algunas veces? Más bien todo el tiempo.
Pero ayer por la noche, fue simplemente increíble, y no solo estaba diciendo eso de alguna manera significando que era genial en el sexo, lo cual era; no voy a mentir sobre eso. Pero la forma en que me manejó, con toques suaves y con tanto cuidado y amor; me asombró y me hizo sentir que yo era la cosa más preciosa del mundo para él. Me amaba y no podría haber elegido un momento más perfecto para decírmelo.
"Scar." su voz ronca matutina me sacó de mis pensamientos, mi mirada se movió hacia abajo para verlo apoyando su barbilla en mi estómago.
"Sí Hypno." sonreí juguetonamente, lo que hizo que hiciera un puchero antes de que dejara caer sus labios sobre la piel desnuda de mi estómago. De alguna manera nos las arreglamos para ponernos un par de ropa antes de dormir ayer por la noche, aunque Harry tuvo que ayudarme porque literalmente no podía sentir mis piernas después de lo que hicimos.
"Tenemos una reunión con Valquiria hoy." refunfuñó contra la piel de mi torso, la sensación de sus cálidos labios allí me hizo estremecer.
"¡Oh, mierda, sí! ¿Qué hora es?" entré en pánico, moviéndome pero todo el peso de Harry estaba sobre mí, prácticamente inmovilizándome contra el colchón.
"Tenemos media hora más o menos." Harry se encogió de hombros; mirando el reloj digital en la mesita de noche antes de volver a presionar suaves besos húmedos alrededor de mi ombligo.
"Harry, ¿qué estás haciendo?" lloriqueé cuando sus labios bajaron y bajaron mi cuerpo.
"Algo." murmuró con una sonrisa de satisfacción, sus tortuosos ojos verdes parpadearon para encontrarse con los míos antes de bajar rápidamente mientras se acomodaba entre mis piernas.
Sus traviesos ojos esmeralda, brillando bochornosamente cuando la punta de su lengua tocó la banda de mis bragas. Rodó su lengua plana contra la piel de mi estómago, comenzando desde la banda de mis bragas hasta la parte inferior de mi ombligo. Dedos delicados entrelazados con sus rizos, mis dientes hundiéndose en mi labio inferior mientras él depositaba besos calientes en la tela de mis bragas, excitándome aún más. Su mirada estudió la mancha húmeda en mis bragas que mi excitación había causado, una sonrisa creció en sus labios mientras bajaba los labios sacando la lengua para arrastrarla plana contra esa área. Un gemido bajo salió de mis labios, mis caderas se contrajeron cuando su lengua bailó sobre la parte húmeda del material.
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Kill & Run | H.S
RandomÉl le enseño a ser una asesina exitosa. Ella le enseño a amar, pero no a dejar de amarla.