—¡Le hubieses pedido el número! ¿Cómo no se te ocurrió?
—No, para qué, además recién lo conozco Julieta...
Estaba hablando por teléfono con Julieta.
—¡Y qué! Aprovechá, seguramente le gustás.
—No ¿qué tiene que ver eso?
—Y sí, Ema, fuiste la primera y la única a la que le habló.
—Estaba cerca de él, Juli.
Esa noche, pensaba:
¿Y si le gusto? Digo, es lindo... ¿a mí me gusta?... ¡Pero! ¿qué estoy diciendo? Mirá si le voy a gustar, si hace un día me conoce, y no hablamos casi nada. A mi tampoco me puede gustar. Esto es Julieta, que me dice todas esas cosas y me hace imaginar como ella... mejor me voy a dormir que mañana tengo que ir al colegio de nuevo.
—Quiero volver con vos. Te extraño mucho, me dí cuenta que fue un error alejarnos.
—¿De verdad? Sí, yo sabía que era un error. También te extraño mucho...
—Te amo. ¿Querés volver conmigo?
—¡Sí, obvio que quiero volver! Yo también te amo, Agustín.
¡¿QUÉ?! ¡¿AGUSTÍN?! Me desperté al instante, sorprendida. ¡Soñé con Brian, pero con la cara de Agustín! ¿Qué me está pasando? Estoy segura de que no me gusta Agustín, pero...
Me hago una tostada con mermelada... no puedo prestarle mucha atención a lo que hago, no paro de pensar. Este chico es muy lindo, pero no nos conocemos nada. Aunque parece que nos llevamos bien, ¿y si trato de enamorarme de él y puedo de una vez por todas olvidarme de Brian? Sería injusto usarlo para eso, pero quizás me enamore de verdad... ¿y si mejor no me enamoro de nadie por un tiempo, un largo tiempo? No sé, tengo muchas dudas, voy a ver que pasa hoy.
Sonó el timbre para que entremos al aula. Voy llegando, hablando con las chicas y me callo cuando veo a Agustín cruzado de brazos, apoyado en el marco de la puerta. Me mira, me sonríe, mira para abajo y entra.
Tengo que reconocer que me atrae mucho su timidez. Brian al principio era muy tímido. ¡Ya tengo que dejar de pensar en Brian!
—¿Vieron chicas? ¡Agustín le sonrió a Ema! Dijo Barbi.
No estaba pasando un momento agradable. Agustín estaba sentado en el mismo lugar que ayer, a mi derecha, yo estaba con la mirada hacia adelante, pero podía sentir de costado su mirada penetrante hacia mí. Pero no confiaba totalmente en mi presentimiento, así que decidí mirarlo para comprobar o no mi teoría... conté hasta tres, lo miré y para asegurarme y orienté rápido mi cabeza hacia el mismo lugar donde estaba antes, antes de pensar en lo que había visto. Después de este movimiento, rápido y silencioso, analicé lo que acababa de ver.
Pude ver el movimiento rápido que hizo con su cabeza para mirar hacia otro lado. Tenía razón, no me equivoqué, Agustín me estuvo mirando todo este tiempo. Si antes estaba incómoda, ahora quería ser invisible por un buen rato. Me sentía muy observada, pero... pensándolo bien, Agustín tuvo toda la clase su atención en mí... Debo reconocer que eso me agradó.
Todo el resto de la clase con él se trató de miradas encontradas, y solo dos tímidas sonrisas. Toda la clase fui consciente que él me estaba mirando.
Tocó el timbre para anunciar el fin de la clase, y vi que Agustín se levantó de inmediato. Creo que fue el primero en levantarse. Yo, y mis amigas (como siempre) esperamos a que todos salgan y después nosotras nos levantábamos. Estaba hablando con Barbi, cuando sentí otra vez que una mano se posó sobre mi hombro.
—Hola Ema. Dijo una voz tímida y tranquila que yo ya conocía.
—Hola. Sonreí. —¿Cómo estás Agustín? Traté de sonar lo más tranquila y normal que podía. Fue solo un "hola". Pero un "hola" del chico en el que estuve pensando todo el día. No estaba segura que me gustara, pero, por alguna razón, me puse nerviosa.
—Estoy bien.
—Me alegro. "¿Acaso eso es todo?" Me pregunté. Es decir, no va a preguntarme com...—¿Y tú? Preguntó finalmente. Era lo que toda persona esperaría, pero me sorprendió. Me había interrumpido mis pensamientos. Otra vez. Pareciera que necesita tiempo para dirigirme cada palabra, necesita tempo para juntar valentía y hablarme otra vez. ¿Y si le pasa algo conmigo?
—Bien, gracias. No pensaba hablarle yo de nuevo. El se acercó, si quiere decirme algo, él lo tiene que hacer.
Sonrió, miró para abajo (típico de él) y me miró a los ojos un segundo, como despidiéndose. Dio la vuelta, y se estaba yendo.
Ahora sí, ¿eso es todo? ¿te irás con solo haberme dicho eso? Mantengo mi mirada en sus espaldas mientras se aleja como esperando una respuesta. De pronto se detiene. Se queda parado en el medio del camino. Se toca acaricia la nuca con la mano derecha, y, sin más ni más, voltea nuevamente para mi lado. Giro la cabeza hacia el otro lado, intentando que no se dé cuenta que lo estaba mirando, y obviamente, fue un intento fallido, volteó muy rápido, inesperadamente. Por la vista periférica podía ver que se acercaba. Mis latidos iban más rápido. Mi respiración se aceleraba. Solo esperaba no haberme puesto roja.
—Sabes... Ríe. —En realidad había venido para decirte... si querías, si puedes, tal vez... Estaba demasiado nervioso. —Venir conmigo a tomar un helado, o un café, como quieras...
Sonrío. Su extrema timidez daba ternura.
—¡Claro! ¿por qué no? ¿cuándo?
—....Hoy por la tarde.
Realmente me sorprendió esta frase. Creo que fue lo único puntual que me dijo desde que lo conocí.
—Está bien, ¿a dónde dices que vayamos?
Ya me incomodaba tener que hacer todas las preguntas yo.
—Eh... ¿Conoces el Café de Paula?
Era obvio que lo conocía. Toda la ciudad lo conoce. Estoy segura que me lo dijo así para tener menos responsabilidad si no quiero ir.
—Sí lo conozco, ¿vamos ahí?
—Sí...
Sonrío. Esa sonrisa fue bastante forzada. Ya estaba nerviosa, pero si él se daba cuenta, se iba a sentir mal y era muy posible que no me hablara más en toda su vida. Así que preferí sonreír, y que no sea ya tan tímido.
—Bueno, nos vemos allí entonces...
Esta vez no me sonrió. No me miró. Solo se fue. Creo que haberme invitado a tomar un café fue más que suficiente para él.
Volteé para ver a mis amigas, y ya se habían ido. Quise mirar a Agustín otra vez, pero ya no estaba.
Gracias por leer! recomienden por favor! avísenme cuando quieran la parte 4 :)
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Piezas de un rompecabezas
Teen FictionEma creía que tenía una relación perfecta con su novio Brian, pero descubrió que eso era fantasía de ella cuando él decidió dejarla. Ella continuamente vive tratando de desprenderse de ese amor, tratándo de reemplazarlo por otro. Pero las cuestione...