F R E A K

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Destinadas

Hange era una chica rara que vestia con faldas largas como de religión y camisas de mangas, siempre se veía con un bolso grande y algo viejo que cuelga en un brazo en dónde guarda sus utensilios de dibujo para su universidad; Se le veía con un chongo mal agarrado y algunos cabellos traviesos saliendo de este mismo, unas botas algo sucias y portaba unos lentes que mantenían cautivos aquellos enormes ojos café y su reservada personalidad la hacían muy llamativa para tí. Aquella jóven que sentía cierto interés en esta chica.

La habías llegado a ver varias veces en la biblioteca en la sección de astronomía y anatomía. Aquella chica se tomaba muy enserio la lectura, tomaba algunos apuntes en su cuadernillo, la llegabas a ver cuándo tenias la obligación de ir a la biblioteca para investigar algunas cosas que te pedían en clases, y otras veces la veías sentada en los pastos o bancas de afuera de la universidad, siempre en soledad.

- Que gustos tan raros tienes (n)...

- ¿Mhm?

Te interrumpió aquella voz de tu amiga ymir quien observaba como mirabas con una sonrisa embobada a aquella chica de lentes al notar que estaba comiendo de un sándwich y tirando boroñitas a los pájaros para que comieran.

- Hange es rara, no le veo algo de atractiva entre todos esos trapos viejos. ¿Quien la vestirá? - Pregunto intrigada ymir con los brazos detras de su cabeza observando desde aquella banca a hange junto a tí.

- A mi se me hace linda, me intriga, siento que es... especial, me gustaría que le gustaran las chicas.. tal vez podría estar con ella.

Tu amiga ymir estaba algo extrañada, para su gusto hange se le hacía muy rara y poco atractiva, pero a ti te llamaba mucho la atención de ella, no la entendía, su estilo era diferente, sí, pero eso te gustaba.

- Tu eres muy linda para ella.

- Al contrario, ella es muy linda para mí... - Era tanta tu atención hacía hange que notabas cuando usaba algo nuevo o tenía algún accesorio y ese día notaste que volvió a usar su brazalete turquesa que había dejado de usar por al menos 1 semana. Dejaste salir un suspiro quitando tus manos del pasto para abrazar tus propias piernas.

Ymir sabia que te gustaban las chicas diferentes, justo como Hange asi que era hora de aceptarlo, Pensaba.

- Si tanto te gusta, ve hablarle. - Comentó aquella pecosa.

- Ni loca, apesar de que tu la mires así como "Una chica insignificante" siento que me pondría muy nerviosa incomodarla sabes...

Hasta el momento nunca tuviste la oportunidad de hablarle a hange porque te daba mucha pena, te daba ese aire de que se incómoda por cualquier cosa, por ello siempre se encontraba sola, quitando el hecho de que toda la universidad pensaba que era una rara por eso preferias solo observar y apreciar su belleza a lo lejos y evitarla a toda costa para no causar malos entendidos. Muchos pensaban que tal vez era bruja por su vestimenta y no lo decían por el hecho de que siempre olía a hierbas amargas o algunas especies, si no porqué a veces leía libros sobre brujería cuando su tiempo sobraba, pero para ella era lo mas normal. Muchas veces la acusaron de envenenar a un gato a las afueras del instituto, ya que ese gato siempre se veía a las afueras de la universidad y un día tan sólo murió. Muchos aseguraron que vieron a hange darle de comer y después de eso murió.

Pero no eran mas que puras mentiras.

Esa tarde saliendo de clases fuiste con ymir e historia a comprar algunas cosas y por cosas del destino pasaron por una tienda esóterica, te sentiste atraída a esta y entraste cuidadosamente observando tu alrededor.

Decode || Hange zoe Donde viven las historias. Descúbrelo ahora