Presente
Dimitri
La cabeza le reventaba, pero eso no quitaba el hecho de que estaba observando en silencio a la mujer que había pasado de estar completamente pálida a completamente roja en cuestión de segundos.
Se hubiera reído si la situación no fuera tan complicada.
Esos anillos no deberían estar en su dedo o bueno sí, pero no cuando Alessandro parecía a punto de comérsela viva y ella tenía el aspecto de un cordero asustado.
Necesitaba cortar la tensión que se cernía sobre nosotros como algo que no dejaba respirar a ninguno.
— Soy Dimitri Korolev, lamento haberla asustado pero entenderá que nosotros estamos igual de perdidos que tú — le explicó tratando de no alterarla más, parecía un ciervo asustado, teníamos que arreglar esto como fuera.
La mujer se detuvo a observarnos otro largo momento antes de bajar la vista hacia nuestras manos, dudando.
Las pistolas, claro.
Sin hacer ningún movimiento brusco que la asustara más guardé mi arma haciendo una seña a Alessandro para que siguiera mi ejemplo.
— No, yo lo siento, no sé qué pasó anoche pero no suelo hacer… esto — dijo señalando a su alrededor.
Negó levemente él, quitándole importancia al asunto, lo mejor sería que solucionaran esto antes de que alguien se enterará.
— Creo que tendríamos que sentarnos y ver cómo arreglamos esto — explicó hacia sus dos acompañantes.
Ella asintió luego de un momento de duda, luego apartó la mirada acomodándose la garganta.
— Creo que deberían de vestirse primero — soltó con un tono divertido que claramente él pudo notar.
Bajó la mirada hacia su cuerpo totalmente desnudo e hizo una mueca al notar que cierta parte de su anatomía estaba medio despierta también.
No dijo nada al respecto solo se puso en marcha hacia el baño tomando sus pantalones y ropa interior, ya luego buscaría la camisa.
No pronunció palabra cuando sintió a Alessandro seguirlo, ya cuando los dos estaban vestidos salieron observando a la mujer que parecía muy concentrada leyendo unos papeles mientras desayunaba algo que no sabía de dónde había salido.
— ¿ Eso es lo que creo? — preguntó Alessandro acercándose a ella para sentarse a su lado, mientras está asentía para luego ofrecerle un poco de lo que sea que tuviera esa taza en sus manos.
— Quería ver saber si esto era realmente legal, ya que casarse con dos personas no es que sea posible, pero al parecer lo es — explica suavemente dirigiéndo sus palabras hacía nosotros.
Tomo el lugar vacío a su lado observandola.
— ¿Como es eso posible entonces?— cuestionó con curiosidad.
Ella frunce el ceño concentrándose en lo que tenía en las manos.
— Es posible porque en la teoría solo estoy casada con uno de ustedes en diferentes aspectos, al parecer estoy casada contigo por civil — señala a Alessandro quien sigue tomando el líquido de la taza que le habían ofrecido, — Y por lo religioso, estoy casada contigo — exclama dirigiendo su mirada hacia mi.
— Ya veo la razón de toda esta complicación — soltó un poco fastidiado por el asunto.
— Aún así eso no es todo, pues al parecer se redactó un contrato vinculante con todas las partes para que se cumplieran algunas normas dentro de lo que conlleva pues... No lo sé, muchos años.
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Un Desastre Encantador #1
Ficción GeneralSaga Mafia Americana. Gia D' Angelo tiene muchas ideas para su fin de semana y creó una lista con ellas. 1. Conseguir un empleo donde la valoren. 2. Seguir siendo la mejor Hacker que el mundo haya visto. 3. Superar a su idiota ex novio. 4. Matar a s...