Capítulo 13.

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Atenea

Por fin después de estar casi tres semanas en el hospital, ya me habían dado el alta y podía volver a casa.

Desde aquel beso, Dani y yo habíamos mantenido las distancias. Apenas hablábamos y las miradas cada vez eran más significativas. Se notaban en ellas las pasión que cada uno sentíamos, pero ambos sabíamos que pondríamos las cosas más difíciles si hablábamos de lo ocurrido

Por lo tanto desde que llegue a casa me pasaba el día encerrada en la que era mi habitación. Empece a decorarla a mi gusto. Saque de mi maleta una pequeña caja que siempre llevaba conmigo cuando dejaba mi casa atrás. Al abrirla me dio un vuelco al corazón. La primera foto que apareció fue de mi primer día de instituto.

Recuerdo ese día como si fuera ayer mismo. Nos habíamos mudado al centro de Madrid a vivir, y por lo tanto mi instituto nos quedaba un poco lejos. Así que decidimos cambiarme de instituto. Al principio no me gustaba mucho la idea, por el simple echo de que no se me daba muy bien socializar con la gente y además que cada mañana iba a tener que pensar que ropa ponerme, ya que en ese instituto no había uniforme.

Recuerdo la cara que le puse a mi madre cuando me lo contó . Prácticamente empece a hiperventilar. Yo dedicaba el tiempo que las chicas de mi edad utilizaban para irse de compras y maquillarse en leer. Yo creo que si ese día hubiera tenido que llevar alguno de mis libros favoritos, lo hubiera pasado algo mal. Porque una estantería entera no me podía llevar.

El caso es que mi madre me llevo de compras, para que tuviera un poco de variedad de ropa. Y nada mas entrar en la tienda, me enamore de una falda de cuadros rojos y negros. Recuerdo que solo quería esa falda, y así fue,me la lleve. Y el primer día de clase me la puse.

Me sentía una estudiante salida de uno de los libros que leía día tras día. Al principio todos me miraban, pero nadie me hablaba. Hasta que entre a mi clase donde nos Iban a dar la típica charla de principio de curso, y entonces fue cuando apareció corriendo un chico con el pelo totalmente despeinado, con una cara de dormido y con la sudadera al revés.

No pude contenerme y empece a reírme, pero esa risita se fue apagando poco a poco cuando llego al final de la clase y se sentó en la mesa contigua a la mía. Nunca olvidare nuestra primera conversación...

-¿Y qué es lo que tanta gracia te hace?-me pregunto mientras sacaba su estuche de color azul.

-Nada, solo que...- no pude contener las risas y volví a reírme. Él cada vez se enfadaba más conmigo y yo más me reía.

-Venga dime de que narices te estas riendo bichito.

-¿Cómo que bichito?-le pregunte con un tono de ofendida.- y me estoy riendo de tí, porque llevas la sudadera al revés..

-Mierda- dijo- no me había dado cuenta. Ya me lo podías haber dicho antes.

-¿Y perder el momento de poder reírme de ti un rato? No gracias.

-Ves si al final te pega el mote que te he puesto. Ese un bichito... por cierto mi nombre es Dani.

-Eso no es verdad-le conteste desafiante- soy una perdona muy tranquila, pero no me digas que tú no te hubieras reído de mi si yo hubiera aparecido con la camiseta al revés.- no podía para de reírme por dentro, la verdad que yo era muy aficionada a llevar la ropa al revés, sobre todo los días que no había dormido nada por terminarme un libro. Y recordar los momentos en los que aparecía por la puerta de mi antiguo instituto y ver la cara de mi mejor amiga Heda riéndose de mi no tenía precio. La verdad este chico me recuerda mucho a mí- Mi nombre es Atenea, un placer conocerte Dani.

-Lo mismo digo bichito, creo que tu y yo vamos a hacer muy buenas migas.

-Si tu lo dices...

Y desde ese momento Dani y yo nos volvimos inseparables.

Cada foto que sacaba de esa pequeña caja de madera, me recordaba a un momento vivido con él. Así que saque todas las fotos, las extendí sobre mi cama y con unas pinzas de madera las fui colocando una por una en las luces de estrellas que tenía en el cabecero de mi cama.

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Huuuuolaaaa❤️¿cómo estáis? Espero que estéis genial. Bueno lo primero de todo me vengo a disculpar con todos vosotros, ya que el miércoles no subí capítulo porque he empezado el instituto y no tengo más horas en el día. Por lo tanto aunque lo avise ya por instagram, lo voy a avisar por aquí también y es que se cambian los días de subida de capítulo. Antes se subían los miércoles a las 7, pues ahora se suben los viernes a las 6. Perdón de nuevo, pero quiero continuar escribiendo esta novela, y a la vez sacarme 1ºde Bachiller. Gracias por todo el apoyo que recibo cada semana, de verdad que no os imagináis lo feliz que me hacen los comentarios en cada capítulo. Estaré siempre muy agradecida cada uno de todos vosotros. Nos vemos la semana que viene. Besos 💋

Dos ciudades un destino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora