𝕷𝖆𝖗𝖌𝖆 𝖛𝖎𝖉𝖆 𝖆 𝖑𝖆 𝖊𝖒𝖕𝖊𝖗𝖆𝖙𝖗𝖎𝖟~ / fem! reader × male! ch

cap 4: La promesa...

16 de mayo/ 1841

Detesto con todo mí ser a aquel hombre. No merece ser emperador, ni menos el esposo de la emperatriz. - decía con enojo el guatemalteco-

Si, yo mucho enojo. - dijo el africano, su español estaba fallando de nuevo-

No,no, “si, yo estoy muy enojado también” , no importa ahora, tenemos que avisarle a los demás y que traten de convencer a la emperatriz que se divorcie de aquel hombre. - dijo el guatemalteco, el africano lo pensó y luego asintió- luego le diremos a Puerto Rico, debe estar aún con ella... África, ¿Tienes papel y pluma? - África nuevamente asintió y fue en busca de los objetos mencionados, el guatemalteco lo siguió -

Salto de tiempo.

¡Bien! Ya lo escribimos para todos... Gracias por la ayuda África. - decía orgulloso y dándole palmadas a su nuevo amigo el africano-

you're welcome, it feels good to help.- como su español iba fallando, volvió a hablar en inglés- And besides ... If I want her to be happy, she's too kind, that emperor would be dead if it weren't for her. - dijo cruzando sus brazos- /de nada, se siente bien ayudar./Y además ... Si quiero que ella sea feliz, es demasiado amable, ese emperador estaría muerto si no fuera por ella. /

Tienes razón - escucharon pasos y ambos voltearon, era Puerto Rico- justo te necesito. Ya que tienes que irte ahora... ¿Puedes entregar estás cartas? También te vamos a explicar. Pero primero las cartas - Puerto Rico asintió-

Si es para que se divorcie de él, claro que los ayudaré.

Oh, ya sabes el plan entonces - dijo el guatemalteco- bien, una cosa menos.

Luego de unos días más, el puertorriqueño fue el primero en irse, entrego las cartas a los demás como le dijo el guatemalteco y el africano. A los días se fue el africano, el guatemalteco era el siguiente en irse, la verdad no quería debido a que sabía que cosas peores le pasarían a aquella Emperatriz.

Emperatriz “______” - decía el guatemalteco mientras se acercaba a la mujer- me contaron que... Hace mucho tiempo los mundos estaban abiertos pero luego se cerró unos años... ¿Quien los volvió a abrir? ¿Quien los cerró?

Conozco una leyenda sobre aquello... Fue durante las invasiones españolas e inglesas... - decías mientras cerradas aquel libro que tanto escribías- hace mucho tiempo... Los países aborígenes convivían con los humanos...

Los aborígenes le hacían rituales a los países como demostración a su adoración y admiración, pero al llegar los países conquistadores, los aborígenes no entendían que sucedían, en aquellos momentos que empezó la matanza, los aborígenes empezaron a odiarlos, entonces los países aborígenes decidieron crear un mundo aparte para que sus humanos no sufrieran y los dejasen de odiar. Hicieron los rituales a sus dioses y lograron separar mundos. Hasta el día de hoy que una joven que iba a una academia de magia decidió abrir mundos para que pudiesen convivir hasta el final.

El guatemalteco solo escuchaba aquella historia prestando atención a todo, pero quería saber más

Y ... ¿Quien fue la que abrió los mundos? - dijo esperando una respuesta-

Yo... Era nueva en la magia y solo quería comprobar si era una leyenda o realidad. Además habían rumores de que siempre había alguien que se comunicaba en ambos mundos. - decías sin preocupaciones,aún recordabas aquel momento, era una mañana,con tu libro de magia en brazos,unas palabras y el cielo pareció romperse, a lo cual en un abrir y cerrar de ojos tenías a algunos países frente tuyo, la mitad de los demás estaba en sus respectivos territorios, tu libro cayó al suelo y quedaste helada por aquella acción, al final todos esos rumores y leyendas eran reales- aquella acción me dio el trono para ser Emperatriz, debido al emperador de aquella época no tenía descendientes

¿Por eso es tan querida? - dijo sonriendo-

Supongo... - te levantaste de aquella silla - ¿Quieres venir a alimentar a mis aves? - hiciste una leve sonrisa, el guatemalteco acepto y ambos fueron al santuario de aves, pasaron un rato juntos hasta que tuviste que volver a tu trabajo de Emperatriz, al guatemalteco no le quedo de otra que ir a armar sus valijas para irse mañana-

Nos veremos en otra reunión Guatemala... - decías mientras despedías al guatemalteco, aquel imito el acto y subió al vehículo para posteriormente irse- mm... Tengo que ir a ver a Luisa... - te diste la media vuelta y fuiste a dónde Luisa descansaba en su reposo, ya eran semanas y ella seguía igual que el primer día, querías saber quién fue. Quien se atrevió a tirarla. Pero cada vez que le preguntabas ella miraba para otro lado-

¡Emperatriz! Ya era hora de que vinieras nuevamente - decía Luisa contenta, tu solo sonreías y negabas con la cabeza-

Lo sé... Pero ya sabes, el trabajo de ser Emperatriz... - tomaste asiento su lado- y... Como mí deber de Emperatriz... - escuchaste suspirar a Luisa, sabía lo que le ibas a decir- ... Tienes que decirme quién fue ...

Realmente quiero decirte... Pero puede suceder algo malo... - decía con algo de miedo,tomaste su mano -

Prometo que nadie te hara daño en lo que yo esté aquí. - dijiste sería, Luisa asintió -

Fue el emperador... - aquellas palabras te helaron la sangre... ¿Acaso sería tan capaz de empujar a tu dama y luego amenazarla? ... Sí. Él sería capaz de aquellas cosas. Respiraste hondo y dejaste descansar a Luisa, pediste que la cuidarán mejor y no le den paso a nadie aparte del médico-

Hasta aquí. Estoy arta de aquel. No siempre tiene que salirse con la suya. - decías enfadada ante todo, yendo a su oficina, ibas a entrar pero escuchaste voces... Lo normal sería irse o esperar... Pero decidiste escuchar-

“ Prometo dejarla para casarme contigo, ella quedará en la ruina.” -era la voz de tu 'esposo' -

“ ¿Realmente lo prometes? ¿Por mí y el bebé?” - ¿Acaso escuchaste bien? ¿El bebé? No, no, no dejarías que un hijo ajeno sea heredero de aquel trono-

Los dejaste, realmente tenías más cosas importantes que preocuparte por el hijo de aquella concubina. Hasta de por seguro no era hijo de él.
Preparabas todo para la siguiente gala. En aquella gala le pedirías el divorcio.

Perdón la demora.