El chico que nunca conocí [✔️]

08. Comida de extraterrestre

Valerie

Mi madre adora cocinar y a mí me gusta meter la mano para robar de sus ingredientes cuando ella no se da cuenta.

Lorenzo odiaba la comida de su madre y siempre se burlaba de ella cuando tenía la oportunidad.

En una de esas ocasiones me di cuenta del porqué a él le gustaba hacer combinaciones extrañas con sus comidas.

«—¡Ew! ¿Esto que es? —una carcajada abandona sus labios—. ¡Parece algo que escupió el perro de Olivia ayer!

—¡Oye! No seas así, pasé mucho rato cocinando.

—¿Estabas cocinado? Pensé que ese olor provenía de baño.

—¡Lorenzo!

—¡Ni creas que comeré eso, mamá!

—Pues no he ido al supermercado y en la nevera solo hay lechugas, frijoles de ayer y creo que una extraña salsa de tomate que usé para cocinar algo hace unos días.

—¡Perfecto! Nuevos ingredientes para probar algo nuevo. Mamá, así es como logré descubrir muchos de mis aperitivos favoritos.

—¿Combinando tonterías que encuentras en la nevera? ¡Eso es lo que te dará mal de estómago!

Lorenzo vuelve a reír, su risa es tan contagiosa que su madre al cabo de unos segundos sólo se une.

—Mejor pediré algo por delivery, ya deja de burlarte.

—¡Excelente idea! Y no, siempre me burlaré de ti y de tus recetas robadas a los extraterrestres»

Hoy mi madre está en su día libre y hornea un pastel de chocolate.

Mis ojos se iluminan cuando me pasa la vasija con lo que quedó de la mezcla y también la cuchara.

Mientras la veo meter al horno la bandeja pienso en la madre de Lorenzo, me pregunto si cuando cocina puede oír las burlas de su hijo o su gran risa escandalosa mientras le recuerda lo mala que es cocinando.

De seguro extraña mucho aquellos momentos.