6.- Nuevo inicio

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El mundo moderno tenía sus ventajas, siendo la principal que Qi Rong podía morirse en una esterilizada sala de hospital y no en un cueva horrible o en una habitación mal iluminada.

— No te preocupes— dijo Shi QingXuan palmeando el hombro de Lang QianQiu—. He-xiong es un médico excelente, estoy seguro que todo saldrá bien.

Lang QianQiu, que había visto como He Xuan y Hua Cheng habían luchado con Qi Rong antes de que se recluyeran en su montaña, lo dudó mucho pero no quiso decir nada.

Qi Rong había tenido dolores abdominales en cuánto su embarazo llegó al quinto mes, además de desmayos y una repentina debilidad que lo mantenía postrado en cama. Por sugerencia de su vecino, Xuan Ji, llamaron a un médico y éste les dijo que el embarazo era de alto riesgo: sin los cuidados necesarios, el bebé podía morir incluso antes de nacer. Así que los meses siguientes Qi Rong se quedó en cama sin hacer nada mientras Xiè Lian, Gu Zi y Lang QianQiu cuidaban de él. El fantasma odiaba esa situación, ¡jamás se había sentido tan inútil! Sin embargo intentaba ser razonable por el bien de su bebé… pero eso no quería decir que no fuera a quejarse por ello.

Y entonces, cuatro meses después, en el momento en que comenzó a entrar en trabajo de parto, un sangrado repentino les hizo ir corriendo al hospital.

— ¿Señor?

Una enfermera se acercó a Lang QianQiu, indicándole que debía entrar a la sala de parto. El dios se levantó de golpe y entró yendo al lado de Qi Rong, que le apretó la mano con una fuerza desmedida.

— ¡Todo esto es tu culpa!— gritó el fantasma—. ¡Esta maldita cosa me está partiendo en dos!

Luego de decir estas palabras, un grito de dolor salió de los labios de Qi Rong.

— Está perdiendo demasiada sangre— dijo He Xuan.
— Es un fantasma, ¿cómo puede tener sangre?— increpó Lang QianQiu.

He Xuan volteó a verlo como si fuera idiota.

— Eso es lo que hace la pastilla de concepción— dijo—. Si un dios la toma, modifica su cuerpo para que sea apto para desarrollar un bebé. Si un fantasma lo hace, le da forma corpórea para que pueda llevar a término el embarazo. Es como si estuviera vivo.

Por eso había tanta sangre. Lang QianQiu trató de calmarse recordando que Qi Rong no podía morir, pero el rostro pálido y sudoroso de su pareja le hizo dudar de ello.

— No puedo creer que vaya a decir esto— dijo He Xuan cerrando los ojos—. Aquí viene. ¡Qi Rong, puja ahora!
— ¿QUE DEMONIOS CREES QUE ESTOY HACIENDO?— gritó Qi Rong, soltando un alarido de dolor que le erizó la piel a todos los que lo oyeron.

Al poco tiempo, un llanto estridente se escuchó y He Xuan sostuvo en brazos a un bebé, luego de limpiarlo y envolverlo en una manta, se acercó a la pareja con una sonrisa.

— Es una niña— dijo entregando la bebé a Lang QianQiu.
— Déjame verla— dijo Qi Rong con un hilo de voz.

Lang QianQiu se agachó para dejar a la niña al alcance de Qi Rong, y él extendió los brazos para cargarla.

— Hola, Xiao Lixue— dijo, sonriendo, y miró a su pareja—. Tenemos a nuestra pequeña… nuestra niña…

Qi Rong cerró los ojos, y su forma se volvió traslúcida un momento. El efecto de la pastilla se había acabado y todo rastro restante de su forma mortal se había ido. Ya no había peligro de ningún tipo.

Este era un nuevo inicio para ambos, con una pequeña vida a su cargo y una familia completa.

❁❁❁❁❁

Estoy llorando brillitos :'D

Buscando un bebéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora