One-shots y Drabbles, Trío Kakashi🌀.

Noche de juego. (KakaIru)

La cuarta guerra ninja había terminado hace algunos meses, Kakashi Hatake fué nombrado como el nuevo Hokage, él acepto en honor a su amigo de la infancia, cumpliría con su rol hasta que su estudiante estuviera listo para tomar el cargo.

Había sido una tarde ajetreada, muchos papeles que firmar, el peliplata suspiró fatigado, esto de ser Hokage no era sencillo, observó su libro que estaba a un lado del escritorio, la curiosidad por seguir leyendo lo invadía, pero aún tenía que terminar de firmar esos papeles.

- ¡Al fin! -Dijo después de revisar y firmar el último papel, ya era de noche, tal vez ya podía irse a casa a descansar, en eso vió como la puerta de la oficina se abrió y entró un hombre pelicastaño con una cicatriz en su cara- ¡Iruka! ¿qué te trae a esta hora por aquí?

- Vine a dejarte estos documentos, son los certificados de los egresados de la academia, tienes que firmarlos.

- ¿Es enserio? -El Hatake frunció el ceño.

- No te preocupes, esperaré a que los termines de firmar. -Le sonrió dulcemente.

- Bien... -Kakashi también le sonrió, pero su sonrisa no era como la de Iruka, esto causó que el castaño se pusiera nervioso- Pero me debes una.

- ¿He? Pero sí ese es tu trabajo.

Kakashi sólo levantó una ceja y luego empezó a firmar aquellos certificados, observaba de reojo a Iruka, quién ahora veía los retratos de los anteriores hokages.

- ¿Tienes hambre? -Preguntó el castaño.

- Un poco. -Contestó el peliplata con su mirada fija en los papeles.

- Iré por algo de comida.

- Está bien, te espero.

Iruka salió de la oficina, Kakashi siguió en sus labores, hasta que minutos después el castaño regresó.

- Te traje algunos onigiris.

- ¡Muchas gracias Iruka!

Ambos se prepararon para comer, Kakashi permanecía sentado en su escritorio, solo apartó algunos papeles, mientras Iruka lo observaba con curiosidad.

- Se enfriaran tus alimentos. -Mencionó el peliplata al notar que Iruka no había tocado su comida.

- ¡Cierto! -El castaño empezó a comer, quedo admirado cuando volteo a ver a Kakashi, este ya había terminado.

- ¡Eso estuvo delicioso! -Mencionó el peliplata sonriéndo.- ¡Oye Iruka! ¿Te gustaría jugar un poco?

- ¿Jugar? pero si estás trabajando.

- Sí lo sé, pero necesito relajarme un poco. -Kakashi se puso de pie y sacó un juego de cartas de la gaveta.- siempre es bueno tener una noche de juego.

- No me digas que la quinta, te contagió su vicio por los juegos. -Mencionó cruzándose de brazos y sonriendo de lado.

- Jejeje talves un poco.. Entonces, ¿qué dices? ¿juegas?

- Está bien. -Contestó Iruka, los dos se sentaron en aquella alfombra y empezaron a jugar.

Después de varias rondas.

- ¡Volví a perder! -Mencionó el Hatake frunciendo el ceño.

- Al parecer no eres muy bueno en esto. -Contestó Iruka sonriendo.

- Bueno... tal vez, aúnque, ¿que te parece si lo hacemos más interesante? Creo que así me concentraría mejor. -Mencionó Kakashi con una mirada sospechosa.

- ¿A qué te refieres con eso? -Preguntó el castaño con curiosidad.

- Bueno... A lo que me refiero es, que podríamos apostar.