Cercanos

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Parecía otro día normal, caminaba hacia el instituto con un hermoso día de primavera, días así me hacen sentir realmente feliz, solo que no sabía que hoy conocería a quien cambiaría mi mundo.
Caminé por las mismas calles de todos los días para dirigirme a clases pero esta vez fue diferente, unas dos cuadras antes de llegar me tope con cuatro "delincuentes", los cuales comenzaron a gritarme estupideces y cerrando poco a poco el paso
- piérdanse.... - les dije, mientras seguía caminando, fue cuando noté que uno de ellos me agarro el brazo impidiéndome seguir caminando - no te pongas nerviosa... no te pongas nerviosa - pensé para mi.
- pero que tenemos aquí- habló el mayor de ellos- pero si no es una hermosa señorita....
- déjenme en paz .... - hablé otra vez, tratando de mantener la calma.
- ¿que te dejemos en paz?... oyeron chicos.... Quiere que la dejemos en paz- gritó el aparente líder a sus compañeros y estos solo rieron....
- por... por favor, no tengo dinero... solo suéltenme - repetí nuevamente.
El líder coloco su cara frente a la mía, dejando de lado su cigarro y escupiendo el humo en mis ojos
- ¿ porque debería hacerlo?... - me respondió con una sonrisa en sus ojos.
- suéltame inmediatamente- le respondí, forcejeando su agarre, pero en un momento sentí como picaba mi mano... comencé a sentir un dolor... era el apagando el cigarro en mi mano... caí al suelo y grite de dolor.
- oh vamos, creí que eras mas fuerte... al parecer tendremos diversión rápida chicos hoy- termino su frase para mirarme a los ojos y agarrarme nuevamente.
- patético, eres un patético - le respondí para tirarle un escupo de saliva en su cara.
- niña... tu eres la única patética - terminó su frase y sentí un golpe en mi mejilla.
Había sido una cachetada, pero sin duda la más fuerte que he recibido, caí de golpe al piso sintiendo la risa de los acompañantes.
Solo quería llorar, ¿ porque a mí? ¿Si no era yo? ¿podría haber sido otra?... muchas cosas pasaban por mi mente cuando sentí una cálida mano en mi cabeza
- ¿ Estas bien? - diablos, si que te pegaron duro estos malditos-
- Estoy bien- respondí a duras penas. Cuando levante mi mirada para encontrarme con quien estaba a mi lado solo pude llorar.
- Vamos, tranquila... levántate- me dijo, mientras me ayudaba a levantarme. -Oye tu, imbécil... ¿que clase de delincuente le pega a las chicas ?
-Eh? .... ¿y quien eres tu?- pregunto el líder con un tono molesto- ¿ acaso quieres también unos golpes estúpido mocoso?
- Jaaaa, eso me parece divertido... ¿quieres apostar quien recibe mas golpes?- dijo el chico de larga cabellera negra con el mismo uniforme de instituto que yo.
- adelante enano- respondió el líder. - vamos chicos, démosle una paliza a este engreído
- espera un momento - me dijo mirándome a los ojos, mientras se hacía una cola de caballo y sonreía despreocupado, hasta podría decir maquiavélico , incluso emocionado de ir a golpear a los otros.

La pelea no duró nada, ni siquiera pestañee y los había derrotado a todos... se acercaba lentamente a mi para ayudarme pero antes sonrío y miró a los delincuentes y gritó fuertemente - Última vez que los veo por aquí, si no quieren involucrar a toda la ToMan con ustedes... - el tono fue aterrador... pero luego rio , dejando ver sus dos colmillos los cuales eran algo afilado, pero se le ve encantador. Sin duda era impredecible.
Me brindó su mano para levantarme, y pude notar que esta estaba roja por los golpes que les había dado a los delincuentes.
El se dio cuenta que miraba sus manos y exclamó - no te preocupes por esto... no puedo evitar no pelear, hoy venía con sueño.
- gracias- le dije mirándolo-
- oh - respondió sorprendido - ¿enserio te quemo con un cigarro?
- no es nada... creo que fue un tipo castigo por decirle patético... es lo de menos- le respondí mientras miraba mi mano.
- vamos -me dijo tomándome la mano- iremos a la enfermería del instituto.
- okei - respondí algo tímida - oye... primero dime tu nombre, se que te visto en la escuela, pero soy bastante mala para recordar nombres.
- jajaja verdad, soy Baji... Keisuke Baji... ¿y tu? 
- natori... natori aly- respondí.
- bueno aly, desde ahora no dudes en avisarme si estas en problemas.
Sonreí con sinceridad a su propuesta y el solo sonreía con sus afilados dientes.
- gracias baji, lo tendré presente-respondí- vamos los dos a la enfermería, tus manos también necesitan cuidados, si no quedaran moretones-
- tranquila... estoy acostumbrado a ello- me respondió-  pertenezco a la ToMan aly... a una banda... una pandilla... pandilleros- me dijo
Lo mire algo sorprendida al principio, pero luego le tome la mano para darle unas palmaditas y le contente - tranquilo baji... lo supuse por tu estilo de pelea.
Solo río y comenzamos a caminar hacia el instituto.

Así comenzó mi historia con el, un encuentro inesperado que me llevo a tener infinitas aventuras y sentimientos que para algunos era simple enamoramiento de instituto, pero para mi y para el, un intenso amor.

Tokyo Revengers / No me sueltes Baji KeisukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora