anatomía; heehoon

3.- Hasta el final.

Habían pasado unos días desde que habían tenido su encuentro. Sunghoon había tratado de evitar hablar del trabajo, ya que siempre que lo hacía él y Heeseung, terminaban en un silencio incómodo. Uno que no había tenido en toda su vida, por lo que a veces era mejor evitar que afrontar.

- Te digo, mi madre ha estado muy metida en estos temas, por alguna razón cree que History Channel tiene todas las pruebas del mundo para meter alienígenas en todo. - Hablaba Riki sin parar, mientras comía de su papa frita, con una atención extrema en el tema del cual estaba hablando con total seriedad.

- Debes admitir...-Sunoo comenzó a replicar, pero fue interrumpido por una dulce voz que se había acercado a ellos.

-Lee Heeseung - Todos los oyentes de la mesa dirigieron su vista a la chica que estaba al frente de ellos. Era pequeña, delgada, de piel blanca y ojos claros. Lucia como una pequeña muñeca de porcelana. - ¿Podría tener un tiempo a solas contigo? -Heeseung frunció el ceño algo confundido y se levantó de su asiento, dejando a Sunghoon con el vacío de su cercanía. Puesto que ambos se encontraban sentado uno al lado del otro, como era habitual. Luego de levantarse, Heeseung asintió hacia la chica y ambos desaparecieron detrás de las puertas de la cafetería.

- Ya es la cuarta en este mes. - Agregó Jongseong mirando a las puertas con los ojos entrecerrados. - No entiendo cómo lo hace. -Suspiró -Es como si fuera el rey de las mujeres. - Jungwon le dedicó una mirada significativa.

Y no era de esperarse, ya que la historia de ellos estaba finalmente relacionada a lo que sería una duda constante, así como también la inseguridad por parte de Jungwon.

Y Sunghoon no podía juzgarlo, entendía completamente la razón. Jungwon se había declarado gay desde muy temprana edad, pero Jongseong lo había descubierto cuando conoció a Jungwon. Antes de eso Jongseong era un completo paquete heterosexual de un prototipo ideal de la sociedad, es decir, tenía sobresaliente en todas sus materias, le gustaba hacer deporte, era amable y sabio por naturaleza, era alto y de facciones masculinas, pero por sobre todo, Jongseong había sido heterosexual toda su vida.

Por lo que Jungwon sentía completamente inseguridad, el miedo que de que un día él le dijera que sólo estaba experimentando o estaba curioso y que ya no quería seguir con él, estaba constantemente en su pecho como un demonio.

- Es que hay que admitirlo Jongseong, Heeseung sí que es atractivo. - Jake habló con un aura de adolescente enamorada, con un brillo singular en sus ojos. - Es como si fuera un muñequito de porcelana ¿O no? - Su vista se dirigió hacia Sunghoon - Tú que has sido su amigo toda la vida ¿No lo encuentras si quiera un poco atractivo?

¿Un poco atractivo? Claro que lo era, tenía una belleza pura.

Heeseung era la definición de atractivo, desde su suave cabello hasta la forma de sus piernas que eran uno de sus mayores atributos.

Pero eso no lo diría, claro que no.

- No podría encontrarlo atractivo, es un hombre - Trató de sonar serio, pero sus amigos lo miraron incrédulo. - Además nuestra relación es solo amistosa, hasta se podría decir fraternal ¡No combinen cosas! ¿Cómo se vería que yo anduviera diciendo que es atractivo?

- Vamos ¿Acaso nunca has dudado por él? Suele pasar entre amigos. - Jungwon rio divertido. -Los amigos siempre suelen tener encuentros cuando están borrachos o muy dejados a llevar.

Sunghoon negó con la cabeza.

- Eso es imposible, - Jongseong bufó enojado mientras le reprochaba. - Hasta yo he dudado, a veces encuentro que Jake es demasiado atractivo. Tan solo míralo, todo en su cara dice "Soy un dios griego" - Hablo sin medir que esas palabras Jungwon las tomaría con sus inseguridades y le diera un golpe en la cabeza.